La risa sí paga ¡Qué Dios nos ampare!

El humor y la música, juntos, son bálsamo para el alma. El espectáculo Qué Dios nos ampare, en el que la cantante y humorista Luz Amparo Álvarez interpreta a más de 50 personajes, cumplió la expectativa de los asistentes a la función. El público pagó por lo que recibió. Dos horas de esparcimiento, de humor inteligente, de imitación literal, de interpretación teatral y musical que dejan ver el talento de la artista.

La dinámica de la función agarra al espectador con su montaje audiovisual y el acompañamiento escénico. Una pareja de bailarines le hacen la segunda a la protagonista en su constante cambio de personajes, unos con más caracterización que otros, pero todos con la esencia del imitado. A Álvarez solo le basta un gesto, una posición corporal y su voz para representar o caricaturizar o otros. El bailarín también interactúa con ella y anima al público mientras aparece un nuevo personaje en escena.

Cantante

Ella no solo hace otras voces, la suya es también la de la cantante que acaba de sacar su segundo disco, Lo que soy, que como colofón, interpretó acompañada del músico, compositor y productor, Ricardo Prado, quien también le regaló al público El Aprendiz, composición que narra, de manera divertida, una historia de vida, simple y común, que puede ser la de cualquiera.

Qué Dios nos ampare lo trajo a la ciudad Reina Producciones de María Ligia Zuluaga López y Jorge Hernán López Carvajal. El buen espectáculo lo agradeció el público con dos horas de carcajadas y continuos aplausos.