La novela gráfica, una nueva alternativa

COLPRENSA|LA PATRIA

En 1991, el historietista Art Spiegelman finalizó su obra Maus. En ella, el autor contaba la historia de su padre como sobreviviente de la Segunda Guerra Mundial. 

¿Cuál era la diferencia? Que en vez de tratar el tema a través de un texto corrido, la historia se contaba con ayuda de viñetas, una novela gráfica, donde los judíos eran ratones y los nazis gatos. 

Una obra ejemplar de esta forma de contar historias y que además ganó el premio Pulitzer en 1992. Relatos por lo general para un público más maduro, densos y dramáticos que se cuentan con dibujos, como lo explica el ilustrador de cómics Sergio Villa. 

Difiere en el cómic tradicional también en su extensión. Normalmente este tiene unas 22 páginas, mientras que la novela gráfica puede ser de 100 o más. 

“Los cómics pareciera que no tuvieran final. Por ejemplo, Spider Man en cada historieta pelea con un enemigo y es necesario dejar intriga para que los fanáticos esperen la próxima aventura. En el caso de la novela se puede llevar una rítmica, o sea, tener momentos tensionantes, bajar los ánimos con instantes tranquilos y subir a situaciones extremas con un final cerrado”, dice Sergio. 

Diferentes tipos 

Hay novelas gráficas que nacen como tal, por ejemplo Notas al pie de Gaza del maltés Joe Sacco, en la que con ayuda de las viñetas, el autor contó una masacre de civiles palestinos. Combinación de crónica periodística e ilustración. 

Otras como La ciudad de cristal, tuvo una transformación. Nació como una novela del escritor estadounidense Paul Auster en 1985. Luego, David Mazzucchelli y Paul Karasik la adaptaron como novela gráfica. 

“Sin embargo, hay otra forma de crear novelas gráficas, como es hacer compendios de historias como las de la serie Batman RIP, que al reunir todos los volúmenes en un libro se convirtió en novela gráfica”, explica el docente de cómics de la UPB, César Ramírez. 

A leer 

Si es de las personas que gustan de textos densos y tiene un mayor tiempo para dedicarle a la lectura, las novelas gráficas son buena opción. 

Si busca algo más ligero y de menos tiempo, el cómic sería su elección. 

Para Saúl Valencia, director de la escuela de cómic y desarrollo creativo Plasart, hay varias novelas gráficas recomendadas, muchas creadas por el estadounidense Frank Miller como Sin city, 300 y El retorno del caballero oscuro. 

Queda en el gusto de cada lector la elección de la novela gráfica que más se adapte a su estilo. 

Lo importante es no dejar pasar la oportunidad de leer estas obras de arte del trazo y la estética.