Identidad con una mirada

Karol Moreno García

LA PATRIA | Manizales

La huella digital sirve para identificar a una persona, por eso es usada en sistemas de seguridad, pero no es la única alternativa, el iris también es una característica única y puede ser leído mediante herramientas tecnológicas.

La empresa manizaleña Jaramillo Villegas creó un dispositivo de identificación biométrica del iris, que implementan en la distribuidora Pimpollo para registrar el tiempo de trabajo de los empleados.

El gerente Juan Carlos Jaramillo Villegas y los ingenieros de sistemas Sebastián Velásquez Quintero y Jesús David Montoya Rivera  empezaron en el 2014  a diseñar su prototipo para leer iris. “La distribuidora Pimpollo encontró dificultades en su sistema de huella para controlar el tiempo laborado. Como ellos son una planta de sacrificio, todo el tiempo tienen las manos húmedas, la huella no nos sirvió. ¿Entonces qué hacemos?, me preguntaron y les dije hagamos un lector de iris”, comenta Juan Carlos.

Iris Punch

La meta era la innovación. Los ingenieros tomaron diferentes elementos que ya existían en el mercado e inventaron una carcasa de acero inoxidable y un software para darle vida a Iris Punch.

El gerente dice que en el planeta no existen muchos fabricantes de lectores de iris. “Los demás lectores son de plástico y muy costosos. Esta tecnología la usan muy poquitos en Colombia y en diferentes partes del mundo. Un lector de iris para 150 personas, que almacena 10 mil transacciones en la memoria, vale 2 mil dólares (unos $5.800.000)”.

La cámara utilizada en Iris Punch, es de la empresa coreana Iritech, Inc., dirigida por Daehoon Kim, pionero de la biometría de iris. “Conocí esta empresa hace dos o tres años en una feria de Las Vegas, pero los ignoré. Cuando se dio el proyecto los contacté, les mandé fotos de nuestro prototipo y les encantó. En la actualidad nos mandan proyectos para que desarrollemos en Colombia”, recuerda Jaramillo.

Registro

Para el proceso de registro en el dispositivo, el usuario debe fijar el ojo a una distancia de 15 centímetros del lector de iris, que se ve como un espejo con un círculo dibujado en el centro, en el que se refleja el iris.

Cuando el lector captura el patrón del iris suena un timbre para indicar que la operación está hecha. Esta acción se realiza tres veces por cada ojo. Luego se introduce el número de cédula a través del teclado y listo, ya está enrolado en el sistema.

Un usuario registrado solo debe acercarse al dispositivo y la cámara infrarroja leerá su iris y confirmará su identidad. Luego arroja el número de cédula en la pantalla.

Seguridad

Esta tecnología no es perjudicial para la vista. Su funcionamiento es mediante la lectura del ojo y a través de una fotografía. La cámara tiene un juego de espejos que toma una imagen del iris y mediante técnicas de procesamiento de imágenes guarda las características. Esta tecnología cuenta con certificados de seguridad.

Juan Diego Polanco, ingeniero manizaleño, afirma que el siguiente paso en la evolución de Iris Punch es tener la capacidad de almacenar en la nube (internet) toda la información que recoge.

¿Qué es el iris?

El optómetra Rafael Amaya explica que el iris, encargado de dar color a los ojos, es un músculo que ayuda a la pupila a abrirse y cerrarse. “En su desarrollo genera un cambio único porque depende de cómo se abrió y se cerró durante todo su proceso de formación en la niñez y eso es lo que le da una característica única. El iris parece un mapa, tiene manchas, forma y estructura diferente en cada persona”.

Iris Punch proyecta una luz infrarroja a la hora de capturar la imagen biométrica del iris, que cuenta con certificados de seguridad para garantizar el cuidado del ojo. Amaya indica: “para determinar si una luz infrarroja es dañina para el ojo habría que definir la frecuencia en el espectro electromagnético de luz”.

Otro proyecto

La empresa Jaramillo Villegas también desarrolló el sistema Bio Transfer U para una compañía de logística de proyectos de impacto social que trabaja con la Organización de las Naciones Unidas. “Necesitaban un dispositivo para verificar el pago de subsidios. Entonces les presentamos como propuesta el Bio Transfer U que permite leer el iris de ambos ojos al mismo tiempo”, señala el gerente.

En la actualidad lo están implementando en Malaui (África). Los usuarios se identifican en el dispositivo y este arroja la información sobre cuánto dinero debe recibir. Tras tener el subsidio en sus manos, se vuelve a leer el iris para confirmar la transacción.

Fotos | Cortesía Jaramillo Villegas | LA PATRIA