Seminarista, acusado de abusar de niña de 13 años

LA PATRIA | MANIZALES

A un sujeto, de 24 años, seminarista y sacristán en La Dorada y Puerto Salgar, lo capturaron investigadores del CTI de la Fiscalía del puerto caldense. El Juzgado Quinto Promiscuo Municipal lo requirió por acceso carnal abusivo con menor de 14 años, por solicitud de la Fiscalía Cuarta Seccional de ese municipio.

Los hechos

En noviembre del 2013, el supuesto abusador sexual, que en ese entonces era seminarista del Buen Pastor de Puerto Salgar y sacristán de una parroquia de La Dorada, al parecer, valiéndose de la confianza depositada por la familia de la víctima accedió carnalmente a la niña de 13 años.

El seminarista, que también era profesor de catequesis, habría invitado a la niña, a través de engaños, a que lo acompañara al centro de La Dorada para ayudarle a repartir unos bonos con el objetivo de recaudar fondos para la parroquia. Una vez allí la llevó a un hotel donde habría abusado de ella.

La madre de la menor conoció por medio de un familiar lo que sucedió, luego de que percibieron cambios en su comportamiento y un bajo rendimiento académico. Instauró la denuncia y una Fiscalía Seccional y un grupo de policía judicial del CTI asumieron la investigación.

Al parecer, esta denuncia motivó el retiro del seminarista del claustro religioso y en la actualidad se desempeñaba como sacristán en La Dorada.

En audiencia de legalización de captura y formulación de imputación, el indiciado no aceptó los cargos. Sin embargo, un juez le impuso medida de aseguramiento con detención domiciliaria.

Lo detuvieron en flagrancia

Un hombre, de 32 años, llegó el miércoles a un bar de Manizales con la supuesta intención de ingerir licor, pero se fijó en una mesera, de 51 años, a quien empezó a acosar, tratar de seducirla y hacerle propuestas a las que ella se negó.

A las 12:50 de la madrugada de ayer, ella, que llevaba un día laborando en el sitio, terminó su turno y pidió un taxi. Cuando se subió, el acosador también lo hizo y la intimidó con arma blanca, obligándola a dejarse tocar las partes íntimas.

En el barrio Altos de Capri descendieron del vehículo y ella intentó apurar el paso, pero el hombre la siguió. Unos patrulleros de la Policía que pasaba por allí vieron una actitud sospechosa, por lo que se acercaron y notaron que la mujer estaba sangrando. Capturaron al sospechoso. Ante un juez de control de garantías no aceptó los cargos por acceso carnal violento, pero lo mandaron para la cárcel.