Protestaron para solicitar la salida de un interno a una cirugía

LA PATRIA | MANIZALES

“Fuera de que le niegan el permiso para salir a una operación de trasplante de cadera, lo maltratan”.

Esa fue la queja de Jorge Andrés Zapata, quien protestaba, el sábado, a salida de la cárcel La Blanca, de Manizales, con otros familiares, porque a su hermano, Jhon Fredy Zapata Jaramillo, presuntamente, le negaron el permiso para un trasplante de cadera que tenía programado a las 5:30 de la mañana en la Clínica del Corazón en Manizales.

El mayor Saúl Archila Duartes, director de La cárcel La Blanca, respondió que de la clínica les avisaron que faltaba un aparato necesario para el procedimiento y, por eso, se aplazó. Según él, eso se le explicó a la familia, pero no entendió.

Según voceros del centro asistencial, el intensificador de imágenes, indispensable para el procedimiento, necesitaba mantenimiento todo el fin de semana, acción que se ejecuta para garantizar la seguridad de los pacientes en las intervenciones. Por eso, se postergó el trasplante. De hecho, otros internos que también estaban programados para operaciones en las articulaciones debieron esperar.

Sin embargo, explicaron que la operación de Zapata Jaramillo, afiliado a la Nueva EPS, es una prioridad, por lo que lo van a reprogramar hoy.

Según los familiares, Zapata Jaramillo, indignado, hizo una huelga de hambre y se cosió la boca cuando le dijeron que no podia salir. Ellos acusaron a los guardianes de golpearlo y aseguran que está muy mal.

Archila Duartes negó que el interno hubiera sido maltratado y que se hubiera cosido la boca. Juan Carlos Pérez, Personero de Manizales, explicó que conversó con el director del penal, pero no pudo verificar esa información personalmente. Aseguró que hasta las 11:00 de la mañana Zapata Jaramillo no comió, pero habló con personal de Caprecom, la Defensoría del Pueblo y con psicólogos de la prisión.

Que vayan a la Personería

El interno lleva dos años allí por tráfico de estupefacientes. “Su problema de salud se debe a que tiene un tiro incrustado en la cadera, si no lo operan puede quedar inválido. Es la segunda vez que le impiden salir a la cirugía, la primera fue el pasado 11 de marzo”, aseguró Nini Johana Zapata, hija del interno.

El Personero invitó a la familia para que se acerque a su oficina y allí corroborar esa información, porque de ser cierta, según él, se debe instaurar una acción de tutela y otra de desacato, ya que a pesar de que está privado de la libertad, deben primar los derechos humanos.

La familia espera que una vez operado, le den el beneficio de casa por cárcel, según ellos, una persona en esas condiciones, no debe estar preso. El personero expresó que le harán valer ese derecho ante el Juzgado de Ejecución de Penas.