LA PATRIA | MANIZALES
A Heriberto Antonio Vélez lo alarmaron los ladridos de un pequeño perro que permanece en la zona de talleres y parqueadero de ambulancias, del hospital San Vicente de Paúl, de Anserma. El hombre estaba de turno de celador y portero de la institución, el pasado fin de semana.
Ante el ruido, decidió recorrer el área ubicada en la parte posterior del centro asistencial. Mientras caminaba, un sujeto que se escondía detrás de una pared lo atacó y lo golpeó en la cabeza.
Al caer, el celador se armó con un elemento que encontró en el suelo y contraatacó a uno de los dos delincuentes, pues luego notó que otra persona acompañaba al intruso.
Los sujetos huyeron escalando la malla de seguridad de este sitio. Por las lesiones, Vélez tuvo una incapacidad de cuatro días. Ya denunció ante las autoridades para que traten de capturar a estos delincuentes que, al parecer, pretendían robar equipos de las ambulancias.
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