LA PATRIA | MANIZALES
Las pretensiones económicas de un joven en situación de discapacidad, víctima de abuso sexual del sacerdote Fabio Isaza Isaza, quedaron inicialmente en $25 millones. El abogado del afectado solicitó una indemnización de $400 millones, pero un Juzgado Civil condenó a la Arquidiócesis de Manizales a cancelar 35 salarios mínimos mensuales.
"Quedamos inconformes. El abogado apelará. La Curia tiene mucha plata y debe pagar por los perjuicios que me causó", indicó la víctima. El caso ocurrió en el templo de La Inmaculada, en Manizales.
La solicitud era alta debido a que el agredido presentó afecciones psicológicas luego del abuso que soportó. "Me toca ir a Pereira a los controles, miércoles y viernes, y sale muy caro", expresó.
Los hechos se remontan al 2007. El joven era el acólito de la parroquia. La familia denunció, un año después, que el joven le pidió ayuda espiritual al sacerdote, "porque tenía pensamientos impuros y deseos de masturbarse". Lo llevó a un cuarto de la casa cural y lo tocó.
El Juzgado Séptimo Penal del Circuito lo condenó a 64 meses de cárcel, el 2 de mayo del 2012. Y en abril del 2013, el Tribunal Superior de Manizales la ratificó. Isaza Isaza laboró en Pácora y Villamaría.
En agosto del año pasado, un juzgado de Manizales le ordenó a la Arquidiócesis de Manizales pagar $100 millones a un menor que se desempeñó como acólito en Filadelfia y que fue víctima de los abusos del sacerdote Pedro Abelardo Ospina, en el 2008.
Al condenado, quien fue párroco del municipio, lo condenaron en el 2013 a pagar 20 años de prisión por acceso carnal violento. La Curia apeló.
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