A PATRIA | MANIZALES

"Me agrada que hayan dado con esas personas y que se estableció que tienen que ver con la muerte de mi papá", expresó un hijo de Luis Carlos Gómez Aristizábal, de 64 años, asesinado el 16 de abril del 2015 en el barrio Pitalito de La Dorada.

La noticia conmocionó al municipio y a Caldas, pues luego de hallar el cuerpo del señor encontraron, en un caño, el de su compañera sentimental, Luz Viviana Londoño, de 29. Además, al lado del cadáver de Gómez Aristizábal permaneció, durante cerca de 29 horas, su hija de dos años y medio. Estaba deshidratada.

La Policía Caldas informó ayer de la captura de los tres supuestos responsables del hecho, dos hombres y una mujer. Los detenidos, al parecer, tenían negocios con la víctima, que era prestamista. No aceptaron cargos, pero los mandaron para la cárcel.

El coronel Necton Lincon Borja Miranda, comandante de la institución, explicó que al inicio la investigación fue compleja por la poca información obtenida. Sin embargo, criminalística, soportada en pruebas técnicas en los lugares de los hechos, logró las primeras pistas.

Luego, testigos aportaron valiosos testimonios tenidos en cuenta por la Fiscalía para obtener las órdenes de captura.

Así fue

El año pasado, los doradenses se asombraron inicialmente por la muerte de Gómez Aristizábal. Los vecinos reportaron ese mismo día la desaparición de Londoño, a quien encontraron horas después, en un caño de la vía La Dorada-Norcasia. Las autoridades lo reconocieron por un tatuaje en su brazo derecho, con el nombre de su hija. A ella, según se supo, la asfixiaron con bolsas, la ubicaron en posición fetal, la amarraron con lazos y la metieron en bolsas de basura para luego arrojarla a un caño.

Un hijo de Gómez Aristizábal dijo que su padre era prestamista, que habló con él 15 días antes del homicidio y le manifestó su preocupación porque la gente no pagaba.

"Esa noche del crimen llovió muy fuerte en La Dorada y quizá eso se prestó para que los asesinos hicieran de las suyas.

Revisamos la casa y vimos que todo estaba intacto, pero faltaban un arma de fuego y el dinero", expresó.

Añadió que estaban seguros de que fue un robo y de que se se trataba de personas cercanas, pues sabían dónde guardaba el dinero.

Por homicidio en Irra

Irra. A 30 años de prisión podría enfrentarse un joven, de 19 años, por el asesinato a puñal de su propia pareja sentimental, crimen que presenció la hija mayor de la víctima, menor de edad.

A Néstor José Osorno Betancourt, alias Caco lo mandaron para la cárcel de Anserma, tras aceptar que mató a Liliana Rentería Henao, de 27 años, el pasado domingo en Irra (Risaralda).