LA PATRIA | MANIZALES*
66 adultos mayores perdieron la vida en las calles de Manizales, atropelladas por vehículos, en los últimos cinco años, desde el 2014 hasta la fecha. En el 2018 la cifra asciende a nueve peatones, cinco de ellos arrollados por motos.
Las historias de este año son casi similares. En cuatro casos que recogió este medio, sus familiares y amigos reconocen que los adultos iban solos. El Código Nacional de Tránsito establece que deben ir acompañados de una persona mayor de 16 años al cruzar las vías.
Sin embargo, expertos aseguraron que no es bueno dejarlos solos en casa y permitirles que disfruten de actividades físicas.
Historias
El lunes 26 de marzo, en la carrera 21 con calle 28, murió atropellado Rubén Acosta Giraldo, de 79 años, pensionado de la Alcaldía de Manizales.
"Mi padre iba por unos medicamentos a la EPS. Estaba pendiente de que se los autorizaran. Ese día madrugó, se sintió fuerte y quiso ir solo. Mi hermana le dijo que lo acompañaba, pero se negó y se fue. No sabemos qué pasó, todo es especulación. No queremos revivir ese momento, son muchas las cosas que nos dicen, lo único que sé es que el accidente ocurrió una vez él salió de la Nueva EPS, ahí en el Parque Caldas", dijo Rubén Darío Acosta.
Dos meses antes la víctima fue José Raúl Torres, artesano de 83 años. Una moto lo atropelló en Los Cámbulos. "Salió hasta Villamaría, venía caminando, buscó atravesar la Panamericana y no utilizó el puente peatonal. Cuando iba por la calzada lo atropellaron", narró su amigo Henry Arias.
Añadió que José Raúl vivía solo, le gustaba mucho caminar y usaba poco el transporte público. Vivía en Aranjuez, fabricaba canastas y cosas pequeñas. Lo sostenía un hijo que vive en Estados Unidos.
A Víctor Necti Franco Cortés, de 83 años, de Marquetalia, lo atropelló una moto el martes 13 de febrero. "Sucedió frente a Coldeportes. Sabía que solo podía pasar la cebra cuando hubiese más personas. Ese día iba solo y por lo que vi en cámaras de los negocios del sector, lo arrollaron cuando llegó al segundo carril. Era una moto de alto cilindraje. Murió al otro día", relató Mauricio, hijo del adulto mayor. Víctor vivía desde hace seis años en el barrio San Jorge. Era agricultor y enviudó hace dos años.
Educación vial
El gerontólogo y docente de la Universidad de Caldas José Fernando Gómez Montes calificó de dramáticas estas cifras y les puso nombre: motociclismo. Explicó que el 95% de los accidentes involucra a los conductores de este medio de transporte.
Añadió que el problema es de ambos lados y que se requiere conciencia vial, respeto por los peatones y que estos a su vez cumplen con las normas.
El psicólogo José Fernando Vélez Trejos, docente de la Universidad de Manizales, coincidió. Dijo que esta situación tiene tanto de largo como de ancho. “Los mayores requieren de personas que les colaboren dadas sus comorbilidades, lo que los hace más vulnerables”.
Con ayuda
LA PATRIA recorrió el pasado miércoles varias vías. Encontró de todo: adultos cruzando calles acompañados, otros pasando entre los carros, solos y hablando por celular; y uno más usaba la cebra.
En el descenso al colegio Los Ángeles en la calle 51 Clímaco Henao, invidente de 84 años, intentaba cruzar la calle. Él vive en el barrio San Sebastián y sale cada mes a hacer vueltas. "Se me acabaron unas pastas. La gente me da para el pasaje y vengo a comprarlas". Con su bastón intentaba cruzar la vía. Las estudiantes Alejandra Aristizábal Villada, Laura Angélica Hernández y Geraldín Durán lo ayudaron. Una acción que se debería repetir en toda la ciudad.
El psicólogo Vélez Trejos indicó que un país organizado debe pensar en sus viejos, así como lo ha hecho con las personas en situación de discapacidad. “Puede hacer rampas y menos escalas, avisos más grandes”.
Respecto a los conductores, enfatizó en que se necesita más inteligencia vial, capacitación orientada a proteger la vida propia y la de los transeúntes. "Manejar un carro o una moto va más allá de ponerlo en marcha. Quebrantar las normas viales es ignorancia".
Afectados
Cuando se habla de los afectados, la posición del gerontólogo es clara. “Primero está el anciano conductor, a quienes en otros países se les evalúa cada año para definir su capacidad de conducir, hasta que entra en un proceso en el que se le impide maniobrar, bien sea por deterioro cognitivo o por sus problemas visuales. “Aquí no es el Estado el que está pendiente de esto, sino la familia”, sostuvo.
En cuanto al adulto mayor peatón, dijo que los cuidados son de parte y parte, y que lo primero es tener civismo.
“Para pasar un paso peatonal uno necesita caminar 1,2 metros por segundo y aquí lo hacen a 0,8, es decir que siempre quedará en la tercera parte o colgado de la brocha, como se dice, porque ya ha cambiado a rojo”. Según Gómez Montes, la tecnología no está a la velocidad del adulto mayor, que con los años disminuye la agudeza visual, tiene dificultad en la percepción de contrastes, la marcha se hace más lenta y tiene menos reflejos.
Otro punto en contra de los viejos en Manizales, reiteró, es que el 70% viene del campo y es poco el conocimiento que tiene de las normas de tránsito. Por eso se atraviesan por todas partes.
A esto le añadió que hay medicamentos, entre ellos los para dormir o ansiolíticos, que tienen un efecto retardante que se prolonga hasta el otro día y esto aumenta la dificultad para reaccionar a tiempo. También citó las medicinas psicotrópicas y las antihipertensivas que producen efectos como mareos.
Gómez Montes añade a estas complejidades, que las lesiones siempre serán más severas en los viejos. “Lo peor de una caída es la fractura de cadera. De quienes las sufren, el 30% muere antes del año y el resto queda con temor, lo que se traduce en inactividad o que la familia ya no lo deje salir. Se convierte en un círculo vicioso”.
La opción, explicó, es que el adulto, cuando se sienta seguro, vuelva a salir, porque es importante que haga actividad física, pero antes revise cómo está su salud y si necesita un cambio de lentes. Además, no limitarles sus actividades, que se sientan activos y vivos. No dejarlos encerrados, pues necesitan salir a divertirse, caminar. Hay que motivarlos para que puedan mantenerse activos. Darles confianza para que salgan de nuevo.
Golpe mortal
Un golpe recibido por un adulto mayor, al ser atropellado por una moto que va a 30 kilómetros por hora, empieza a ser mortal, explicó Daniel Solórzano, director de Seguridad Vial del Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Colombia (Cesvi).
"Por eso el Código de Tránsito habla de un acompañamiento especial en la vía para los menores de seis años y los adultos mayores. Para estos últimos la movilidad es reducida. Hay conductores respetuosos con los peatones, pero mientras estos les dan la vía, otro siguen derecho y se forma una cortina", explicó.
Solorzano manifestó que lo más mortal es el choque contra el pavimento, que genera los traumas severos en la cabeza. "Las campañas deben enfocarse especialmente en los motociclistas, para bajarle a la velocidad. Además, trabajar en cultura ciudadana, respetar las zonas donde solo se puede andar a 30 kilómetros por hora. Si vamos a esa velocidad, tendremos más posibilidad de reacción. Hay una iniciativa mundial de cero accidentes. En París, por ejemplo, le están apostando a que todas las zonas sean de 30 kilómetros/hora y eso ha bajado las cifras".
"Entre el 2017 y hasta principios de abril de este año, la Federación de Aseguradoras de Colombia (Fasecolda) registró 8.742 víctimas atendidas con SOAT en Manizales. Sin embargo, las aseguradoras tienen hasta dos años para recibir información sobre las reclamaciones", explicaron en la entidad. Anotó cuánto están pagando por siniestros (SOAT) en el Eje Cafetero.
Manizales Pereira Armenia
2016 $12.484 $77.843 $7.215
2017 $10.000 $106.000 $9.177
2018* $1.072 $4.104 $849
Cifras en millones de pesos.
* Solo enero
Acciones
Carlos Alberto Gaviria, secretario de Tránsito de la ciudad, respondió que siempre están pendientes de los adultos mayores, que no pueden andar solos.
"Les decimos a las familias y a la gente que, por favor, cuiden de sus ancianos. Realizamos campañas con apoyo de la Agencia de Seguridad Vial, visitamos los centros Vida y los asilos, y hablamos con los directores para que los cuiden. Imponemos comparendos pedagógicos y les decimos a los motociclistas que reduzcan la velocidad, pues llegan a un punto peatonal, pasan por el medio de los carros y atropellan".
Sobre la inversión en campañas, aseguró el lunes que ha sido mucha, pero que no tiene las cifras. Recalcó que la semana pasada salieron con un ataúd a las calles para crear conciencia. El viernes indicó que el año pasado fueron $500 millones con aportes de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y que este llevan $100 millones. Además, que no han impuesto comparendos a transeúntes.
Este medio indagó en algunos albergues de ancianos para saber si se han hecho campañas. Obed Aristizábal, quien maneja un programa de 90 adultos mayores en Bosques del Norte, aseguró que nunca han recibido capacitaciones de la Secretaría de Tránsito, algo que, dijo, sería de utilidad.
“Las reuniones las efectuamos en el Cisco, que queda en una avenida muy transitada. Les solicitamos que al menos pongan señales, pero nada, y eso que hemos tenido accidentes de ancianos por esta causa”.
Contrario a lo que manifiesta Aristizábal, el representante legal de Asoviejos, Rubén Darío Parra Duque, sostuvo que de la Secretaría de Tránsito van dos veces al año y les explican a los adultos cómo deben cruzar la calles, les hablaron del cuidado con los semáforos y las señales de tránsito. También aseguró que a comienzo del 2018 repitieron la visita, lo que calificó como una capacitación valiosa y de prevención.
Hugo Gallego, jefe de los guardas azules, explicó que en su trabajo nota que los adultos mayores son poco precavidos al cruzar las calles. "No miran a la hora de atravesar las vías. Van por sitios donde no existen pasos peatonales o donde hay restricción. La gente no respeta el semáforo peatonal y no tiene en cuenta sus limitaciones de movilidad. Además, en las familias envían a los adultos a los mandados y solos, contrario a la norma. Solo se preocupan por ellos cuando ocurre un accidente. Algunos conductores no respetan ni les dan prelación".
El mensaje para las familias es claro: Cuide a sus adultos mayores, saque tiempo para acompañarlos y evite hacer parte de la larga lista de familias en luto por la partida de sus seres queridos.
Para los conductores: Maneje a baja velocidad, respete los pasos peatonales y deles prelación a los adultos mayores. Podría ser su padre, su abuelo, tío o hermano.
*Trabajo elaborado por Eugenia Giraldo, Valerie Echeverry y Diego Hidalgo.
En las cámaras de seguridad de Manizales quedó registrado un accidente en el que perdió la vida un adulto mayor.
El 15 de marzo, a las 10:38 de la mañana, en la carrera 18 con calle 24, pereció José Orlando Gallego Buitrago, habitante de San Jorge.
En el video se observa a la víctima salir de la Galería y caminar por la calle 24 rumbo a la Avenida del Centro. En su hombro izquierdo carga una caja de madera. A José Orlando lo conocían en la Plaza de Mercado como el Duende.
A las 10:34 llega a la Avenida, se para en la cebra, mira a la izquierda y emprende el camino por el paso peatonal. Una moto cruza a alta velocidad y otros transeúntes se atraviesan de lado a lado sin usar la cebra. A las 10:34 con 28 segundos, cuando José Orlando está por llegar al separador, un camión lo embiste y lo lanza unos 15 metros.
La hipótesis de la Policía Metropolitana de Tránsito es que el hecho se dio por imprudencia del conductor (alta velocidad) y por no respetar la cebra.
La posición de la caja que cargaba el fallecido no le permitía una buena visibilidad.
A José Orlando siempre le gustó madrugar. Ese jueves se levantó, como siempre, a las 3:45 de la mañana y a las 4:30 se fue rumbo a la Galería para surtir su tienda.
Regresó temprano, con cajas de frutas y verduras, pero olvidó las bolsas plásticas y la guayaba, por eso le dijo a su esposa que se devolvería. Ella le aconsejó que lo dejara para el sábado; sin embargo, insistió.
Pasaron las horas y tanto su esposa, Lindelia, como la hija, Amanda Lucía, estaban preocupadas porque nunca tardaba tanto. Cuando iban a cerrar la tienda para ir a buscarlo recibieron una llamada del SES Hospital de Caldas. Les informaron que había sufrido un accidente de tránsito. Dos días después falleció.
La familia llegó a Manizales hace 9 años. “Siempre le gustó la finca, aquí vivía contento, pero decía que perdía mucho tiempo y que a veces no tenía qué hacer”, contó Amanda. Por eso era común verlo en un rincón de la tienda jugando parqués con uno de sus seis hijos y su esposa.
Cuando se atropella o lesiona a alguien con un vehículo, se incurre en el delito de lesiones culposas. Si el afectado muere, se habla de homicidio culposo. Jorge Eliécer Osorio Ramírez, juez Penal del Circuito de Riosucio, le explicó a este medio cómo funciona la ley.
Actualmente coexisten dos códigos de procedimiento penal: Ley 600 del 2000 para delitos cometidos antes del 1º de enero del 2005; y la Ley 906 de 2004 (Sistema Penal Acusatorio), para delitos cometidos después de esa fecha. En el primero, si se indemnizaba, existía una figura que permitía el archivo de los casos de homicidio culposo y lesiones personales culposas. En el segundo, no existe esa posibilidad.
El delito se agrava cuando se causa en estado de embriaguez, bajo el efecto de sustancias alucinógenas o se abandona sin justa causa el sitio del accidente (fuga).
En esos casos, así haya indemnización, no puede archivarse. De no existir agravantes y sí indemnización, se acude ante el juez penal del circuito, si es homicidio culposo; o penal municipal, si son lesiones personales culposas, para que el fiscal delegado solicite la preclusión de la investigación y el archivo del proceso.
Para el homicidio culposo, según el Artículo 109 del Código Penal, la pena mínima es de 32 meses y, la máxima, de nueve años. La multa, de $20 millones y se prohíbe conducir vehículos entre cuatro y siete años y medio.
Para las lesiones, depende de la gravedad del resultado de las heridas, que dictamina Medicina Legal. Por ejemplo, si produce deformidad permanente, la pena mínima es de 32 meses, pero queda en 6 meses y 12 días, porque el delito se comete de manera culposa (sin intención) y se rebajan las 4/5 partes.
Un proceso puede tardar hasta 18 meses.
Si durante la etapa de investigación y conocimiento no se llega a un acuerdo indemnizatorio, y se profiere condena, la víctima tiene la oportunidad de acudir al incidente de reparación integral. Para eso cuenta con un mes después del fallo. Debe demostrar los perjuicios para que el juez la decrete y ordene su cancelación. Si la víctima es menor de edad, el incidente se inicia de oficio, sin que haya necesidad de solicitarlo.
2018
15 muertos en accidentes de tránsito
9 eran peatones, todos mayores de 60 años.
6 en moto.
A 5 de los 9 peatones los arrollaron motociclistas.
Nota: Bomberos Manizales informó que entre el 1º de enero y el 4 de abril, del 2017, atendió 229 accidentados en moto y 48 personas atropelladas. Este año, en el mismo lapso, 193 accidentes y 31 arrollados.
La Encuesta Nacional de Salud y Envejecimiento (Sabe) en Colombia 2015 indicó que el número de personas mayores de 60 años en el mundo aumentará de 900 a 2.000 millones entre 2015 y 2050.
*Colombia, al igual que los demás países de Latinoamérica, enfrenta el fenómeno del envejecimiento poblacional y sus consecuencias. Los mayores de 60 años representan actualmente casi el 11% de la población colombiana -unos
5,2 millones de personas- y se prevé que este grupo aumente al 23% -unos 14,1 millones- en el 2050, con un mayor porcentaje de mujeres ancianas.
*Adicionalmente, el índice de envejecimiento del país que estaba en 1995 en 13,7 mayores de 65 años por cada 100 personas entre 0 y 14 años, aumentará a 42 mayores de 65 años por cada 100 personas entre 0 y 14 años para el 2025.
De acuerdo con la Encuesta Sabe 2015, se observó que en la región Central reside la mayor proporción de población adulta mayor (27,1%)
*En el área rural, el 32% no sabe leer y el 33,2% no sabe escribir, mientras que en la zona urbana, el 11,7% no sabe leer y el 13% no sabe escribir.
*La mayoría de adultos mayores que trabaja lo hace porque necesita el dinero (70,79%) o para ayudar a su familia (10,8%), para mantenerse ocupado el 7,1%, para sentirse útil el 4,7% y porque le gusta su trabajo el 6,7%.
*El riesgo de mortalidad y de pérdida de calidad de vida es más del triple en hombres y el doble en mujeres de menor ingreso, en comparación con los adultos mayores de altos ingresos, para cada sexo, respectivamente.
*En relación con la independencia de las personas adultas mayores para el uso del transporte público se encontró que 69,5% lo usa sin ayuda de terceros, 15,1 requiere ayuda y 15,4% no lo usa. Esta independencia disminuyó con la edad. *Mientras 80,9% de las personas entre 60 y 64 años es independiente, esta proporción disminuyó a 19,4%
en las personas de 85 y más años.
*De acuerdo con los resultados de la Sabe 2015, las condiciones crónicas de salud que se presentaron en el 40% de la población adulta mayor en Colombia fueron, en su orden, la hipertensión arterial y la presencia de síntomas depresivos, seguidos por condiciones crónicas asociadas al envejecimiento como problemas visuales y auditivos.
*Según la OMS, la movilidad es lo que permite a las personas mayores llevar una vida dinámica e independiente y está íntimamente ligada al estado de salud y a la calidad de vida de todo individuo.
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