Ocho años por matar durante una riña en bar en Riosucio

LA PATRIA | MANIZALES

Un día cargado de tragos y el malestar por un problema de días anteriores terminaron con la muerte de Israel Guapacha Morales, de 22 años. Todo ocurrió el 6 de agosto pasado en el bar El Motorista, situado en la carrera 4, de Riosucio.

Hoy, por ese crimen, Rubián Guapacha Durán, de 35 años, que no es familiar del fallecido, paga 8 años y seis meses de cárcel. Así lo estableció esta semana el Juzgado Penal del Circuito de Riosucio, al condenarlo por homicidio simple.

Ese día, en el establecimiento público, departían dos grupos de personas, en mesas diferentes, y alejada una de la otra.

En la primera estaban Fabián de Jesús Trejos Alzate, Israel (la víctima), Gloria Largo Morales y Samuel Morales Pescador.

En la otra, Rubián (el condenado), Gloria Nancy Pescador Taba, Arnoldo Guapacha Durán y Juvenal Durán.

En días anteriores, durante las festividades de la vereda La Candelaria, de ese municipio, Samuel peleó con el hoy condenado y le reventó la boca.

"Cada que tomaba y me veía por ahí, me desafiaba, pero no le prestaba atención. Ese 6 de agosto, estaba con mi familia desde la 1:00 de la tarde en El Motorista. Como a las 5:00 llegó Rubián con los suyos. De nuevo me invitó a pelear, pero no le hice caso. Luego se me acercó y me dijo que dejáramos tanto problema. Le respondí que sí", relató Samuel.

Desafío

Como a las 8:30 de la noche, Israel, sobrino de Samuel, cansado de tanto desafío y con ganas de pelear, le gritó a Rubián: cuál es la chimbada. El hoy condenado se paró de la mesa con una puñaleta en la mano y lo agredió en varias ocasiones. También apuñaló en la clavícula a Samuel, que lo persiguió con un pico de botella, pero no lo alcanzó. A los lesionados los llevaron al hospital local.

Mientras tanto, con la información de testigos, la Policía buscó al agresor y lo halló en la carrera 2ª, entre calles 9ª y 10ª, cuando intentaba escapar por los tejados de casas vecinas. Aún portaba la puñaleta. En la audiencia no aceptó los cargos, pero le dictaron detención preventiva. En febrero pasado, antes de iniciar el juicio, se planteó un preacuerdo en el que aceptó los cargos bajo el atenuante de ira e intenso dolor.