Micro y narcotráfico, los flagelos del Eje Cafetero, según consejo de seguridad de la RAP de esta zona

Combatir el tráfico de drogas en todas sus modalidades es el proyecto que priorizaron Quindío, Risaralda y Caldas en la Región Administrativa de Planificación (RAP) Eje Cafetero, pensando en fortalecer la seguridad.

Carlos Alberto Piedrahíta, secretario de Gobierno de Caldas, que participó ayer en un consejo de seguridad de esta RAP, explicó que priorizaron hechos delictivos que confluyen en los tres departamentos y concluyeron que lo que más los está afectando es el microtráfico y el narcotráfico.

Elaboraron varios proyectos. Uno es fortalecer la Unidad Antinarcótico del Eje Cafetero Regional Tres para evitar que sea por esta zona donde se transite para llevar alucinógenos a diferentes regiones del país; también buscan fortalecer la Fiscalía con herramientas tecnológicas para que sean los cabecillas de las bandas criminales los que estén tras las rejas.

Otros proyectos son garantizar la seguridad humana; garantizar una política de salud mental para el tratamiento desde la demanda de drogas, no desde la oferta; que el índice de menores de edad infractores por microtráfico siga bajando y que los que están recluidos tengan un tratamiento integral para su resocialización.

"También queremos comprar un escáner, que cuesta por lo menos $6 mil millones, para que lo utilice la Regional Tres en zonas de frontera y que detecte en los vehículos hasta 0,5 centímetros de presencia de drogas", agregó Piedrahíta.

Para iniciar estos proyectos se requieren por lo menos $10 mil millones.