LA PATRIA | MANIZALES

"La mala suerte me persigue", expresa Darío Javier Yáñez Villafuerte, mientras se frota los ojos e intenta no llorar. Este ecuatoriano, de 28 años de edad, que perdió a dos familiares en el temblor de 7,8 grados que sacudió el 16 de abril pasado a su país, se vino para Colombia en busca de oportunidades.

No ha corrido con suerte. El lunes ingresó por Ipiales, con rumbo a Medellín, donde vive una tía. Sin embargo, se subió al bus que no era y terminó en Manizales. Cuando descendió y caminó unos metros por fuera de la Terminal de Transportes, le robaron el celular, el dinero y sus papeles.

Triste

"Cuando le pregunté a un pasajero que si faltaba mucho para llegar a Medellín, me dijo que iba al revés, pues ya estaba en Manizales. Me bajé, salí de la Terminal con dos maletines y un hombre me amenazó con un cuchillo. Me dijo: 'quieto marica, deme todo lo que tiene'. Miré cómo defenderme, pero apareció otro que me sacó lo que llevaba. En el celular quedó el número de mi tía. Solo necesito llegar a Medellín. Estando allá me defiendo", narró.

Indicó que ha buscado ayuda entre las empresas de transporte, pero no la ha encontrado. "Me dicen que no se puede. En Ecuador es diferente. A ti te ayudan y te llevan, así no tengas dinero. Me ha dado duro el frío. Dormir sentado en la Terminal ha sido difícil. Ojalá no me toque vivir más esto", expresó.

Recordó los momentos tristes en su país, las réplicas que han revivido la tragedia y agradeció la ayuda que les han dado los colombianos para superar esa dura emergencia.

Ayuda

Si quiere colaborarle a este ecuatoriano, puede encontrarlo en las salas de espera de la Terminal, con la camiseta de la selección de fútbol de su país, la única que lo abriga en estos momentos difíciles.

La cifra

663 muertos dejó el terremoto.