LA PATRIA | MANIZALES
A la Flaca se le vio preocupada ayer en una audiencia porque el juzgado de Manizales al que asignaron el proceso judicial que la involucra le negó un preacuerdo que resolvería su situación rápidamente.
Esperaba que aceptara que ella no participó en el homicidio de Luis Delio Buitrago García, de 63 años, el 11 de enero del año pasado en los bloques de San Sebastián.
A cambio planteó que lo de ella fue un encubrimiento del crimen. La juez se extendió en sus argumentos para señalar que las pruebas en el expediente indican que la actuación de la Flaca fue más activa.
De acuerdo con la confesión con la que se intentó convencer al juzgador, la Flaca solo se dio cuenta del homicidio porque escuchó un disparo que la despertó, y cuando se levantó Buitrago yacía muerto.
Sin embargo, las declaraciones de testigos apuntan a que antes del disparo, que acabó con la vida del hombre, hubo un forcejeo y se escucharon voces de la víctima y los dos agresores.
Hubo escándalo
Para la encargada de administrar justicia la versión de la Flaca no es creíble porque esa madrugada, entre las 2:00 a.m. y 3:00 p.m. el ahora occiso protagonizó un escándalo porque se fue de puerta en puerta tocando en los apartamentos.
Buitrago García buscaba a una mujer con la que llegó en un taxi al sector, pero ella se escabulló y se metió a su residencia, por lo que el hombre, que al parecer estaba borracho la buscó sin saber donde vivía.
El ruido que hacía despertó a muchas personas en el conjunto. Un testigo inclusive le aconsejó que se fuera y se evitara problemas, pero él continuó el recorrido.
Cuando llegó al apartamento de la Flaca, compañera sentimental de Joaquín Mejía Alvarán (condenado tras asumir su responsabilidad), estos lo ingresaron a la fuerza, al parecer intentaron hurtarle, pero como él no se dejó le dispararon.
Los mismos testigos señalan que por los ojos mágicos de las puertas vieron a Joaquín y a la Flaca arrastrar un cuerpo escalas abajo y posteriormente los avistaron lavando las escaleras.
En enero pasado capturaron a la pareja en el barrio Galán. Alias Juaco, como le dicen al condenado, aceptó los cargos, pero ella los negó. Mejía Alvarán purga una condena de 18 años, siete meses y 27 días por el delito.
Esperan apelación
Frente a la negación del preacuerdo para resolver la situación de la Flaca se espera un pronunciamiento del Tribunal Superior de Manizales sobre una apelación que presentó la defensa.
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