Fiscalía y Procuraduría piden condena para Ferney Tapasco por homicidio de Orlando Sierra

Ferney Tapasco González.

La Procuraduría y la Fiscalía coincidieron ayer en pedir fallo condenatorio para los acusados por la presunta autoría intelectual del homicidio de Orlando Sierra, subdirector de LA PATRIA, hace 11 años.

Los procesados en el juicio, que se realiza en Pereira, son el exdiputado liberal Ferney Tapasco González, y sus lugartenientes Henry Calle Obando y los hermanos Fabio y Hernando López Escobar.

El fiscal 9 de la Unidad de Derechos Humanos, Luis Alberto Reyes, fue el primero en presentar su alegato de conclusión durante la mañana. En una extensa exposición resumió los 11 años de investigación del homicidio.

El sistema penal aplicado para realizar el juicio, Ley 600, permite que los alegatos sean apenas esbozados, pues como advirtió el juez penal del circuito especializado de Pereira, Carlos Eduardo González, dicho sistema se basa en lo escrito y unido a ello está la permanencia de la prueba.

Ratificó acusación

Durante cuatro horas el fiscal sustentó por qué el escrito de acusación se sostiene e inclusive "se vigoriza con las pruebas practicadas". Reseñó también las numerosas veces que hubo incidentes entre Sierra y Tapasco, además de los miedos que tenía el periodista de ser asesinado.

Partió del intento de soborno que ofreció Luis Fernando Soto, el sicario que asesinó a Sierra, a los policías que lo capturaron en flagrancia, así como la mención que este hizo de José Arley Díaz, alias Pereque, en el mismo instante. A ambos los condenó la justicia por el homicidio.

El fiscal reiteró que a lo largo de la investigación la hipótesis que se fortaleció fue la que apuntaba a Tapasco como autor intelectual. De igual manera analizó el contexto de Caldas para la época del asesinato, y citó una frase de la declaración del exdirector de LA PATRIA Luis Felipe Gómez: "aquí hubo una máquina de matar gente".

De esta manera hizo un recuento de asesinatos ocurridos en Arauca (Palestina) en los años 90, a causa de disidencias de la coalición barcoyepista, en particular dentro de los liberales al mando de Tapasco y su colaborador incondicional, Henry Calle Obando.

También trazó una semejanza entre esas cadenas de muertes con la de numerosos homicidios contra personas mencionadas en la investigación por el asesinato de Orlando Sierra.

Recordó que la última víctima en este caso fue Jaime de Jesús Ospina Millán, escolta de Luis Miguel Tabares, alias Tilín, este último también condenado por el homicidio de Orlando Sierra por haber hecho el puente con los asesinos.

Finalmente ligó al político con el grupo de sicarios que ejecutó el crimen. El vínculo, dijo, es un arma de fuego que le hallaron a Tilín, que era propiedad de Fabio López, hermano de Hernando López. Este último laboró como pagador en la Asamblea, nombrado por Ferney Tapasco cuando era presidente de la corporación.

El procurador precisó

Vidal Manosalva, el procurador judicial que delegó el Ministerio Público para el reinicio del juicio a Tapasco desde el pasado lunes, presentó un documento en el que, además de reforzar los argumentos de la Fiscalía, precisó los delitos en los que incurrieron los acusados, según los resultados de la investigación.

Repasó los testimonios que daban cuenta de las duras críticas de Orlando Sierra a Ferney Tapasco. De igual manera, las amenazas al periodista, los encuentros para "limar asperezas", los miedos del columnista, expresados en sus escritos y en conversaciones con amigos, a ser asesinado por mandato del dirigente político.

El procurador estableció en su escrito los móviles, las actuaciones y relaciones de los sicarios, para llegar a los determinadores del crimen del que fue víctima Orlando Sierra.

Al concluir solicitó que se condene a Ferney Tapasco por homicidio agravado, a Henry Calle Obando por concierto para delinquir y complicidad en el homicidio, y a los hermanos Fabio y Hernando López Escobar por concierto para delinquir y homicidio.

Los próximos lunes y martes intervendrán los defensores de ellos para tratar de desvirtuar los alegatos de la Procuaduría y la Fiscalía.

No vale retractarse

Basados en la jurisprudencia, la Procuraduría y la Fiscalía coincidieron en que la permanencia de la prueba, según la ley, era suficiente para desatender las retractaciones y cambios de versiones de varios testigos a lo largo de la investigación e inclusive en la etapa de juicio.