LA PATRIA | MANIZALES
Cuando empezaron a sonar las campanas de la Catedral de Manizales, justo a las 12:00 del mediodía, miembros del Gaula de la Policía se lanzaron sobre un sujeto de 21 años, que segundos antes recibió $30 millones, producto de una extorsión.
A media cuadra, y simultáneamente, a otro hombre, de 22 años, también lo capturaron por su complicidad con el delito del que era víctima un comerciante de la ciudad, a quien amenazaban con matarlo, lo mismo que a miembros de su familia.
Para las autoridades y el mismo extorsionado no había duda de que los delincuentes estaban dispuestos a cumplir el cometido si este no les cancelaba el valor de la exigencia.
La zozobra que vivía el comerciante desde hace varias semanas lo conocieron las autoridades el 17 de este mes. Patrulleros del cuadrante de Chipre atendieron un llamado de la comunidad que daba cuenta de agresiones a un ciudadano.
Tan pronto arribaron al lugar encontraron a la víctima visiblemente lastimada en el rostro, aún temblando de pánico, quien les contó a los uniformados que los delincuentes ingresaron hasta el hogar, donde también funciona un local.
Ese día lo ultrajaron físicamente y se llevaron dos celulares, aparentemente para pagarse algo de los cerca de $100 millones que le exigían.
Denunció
La víctima no pudo callar más la situación y les contó a los patrulleros la gravedad del asunto. De inmediato se comunicaron con el Gaula de la Policía, que inició la asesoría para dar con los delincuentes. Además, las patrullas aumentaron las rondas.
Pasados dos días los sujetos se volvieron a comunicar y subieron su exigencia a $156 millones. El 20 de este mes, durante una ronda, la policía notó actividad sospechosa cerca de la residencia del comerciante, se acercaron y sorprendieron a un hombre que portaba un arma de fuego, y a otro que lo esperaba en una motocicleta.
Al primero lo capturaron. Pasados cinco días el sujeto quedó libre y continuó acosando a la víctima. Se pactó entonces, de manera controlada, un plan de entrega de parte del dinero exigido.
El pasado lunes el extorsionado retiró $30 millones de una entidad financiera. Al frente lo esperaba el delincuente, a quien reconoció luego como el principal autor de la agresión física propinada 10 días antes.
Todo parecía normal, dos personas hablando, una que le entrega un bolso a otra, seguían dialogando, hasta que la víctima se retiró y en ese momento entraron en acción los efectivos del Gaula.
Las campanas sonaron, decenas de ciudadanos se reunieron para presenciar la captura de los dos jóvenes, una operación que contó con una coordinación previa con Gaula Militar y la Sijín.
El dato
En la verificación de antecedentes, las autoridades descubrieron que al capturado de 22 años le figuran condenas por otros delitos.
Denuncia
165 es la línea antiextorsión del Gaula, que adelanta la campaña “Yo no pago, yo denuncio”.
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