LA PATRIA | MANIZALES

El cuerpo del abogado Samuel Rafael Mejía Hoyos, tío del representante a la Cámara por Bogotá (Centro Democrático) Samuel Hoyos, quedó tendido en una puerta de la finca La Frontera, de Chinchiná. En el corredor del predio también yacía el cadáver de Nicolás Mario Uribe, alias la Mica, con un pasamontañas en la cabeza.

En la mañana del pasado 20 de enero, cuando los investigadores de la Sijín de la Policía llegaron a la escena del doble crimen, encontraron una prueba que sirvió para orientar la investigación. En un bolsillo de alias la Mica había un celular. El análisis del aparato permitió determinar con quién habló días y horas antes de ese hecho, con qué personas se tomaba fotos y cuáles eran sus contactos más frecuentes.

Esos datos, más reconocimientos fotográficos y entrevistas a testigos, permitieron la captura simultánea, en la madrugada del pasado jueves, de las tres personas que supuestamente acompañaban a la Mica el día de la doble muerte: alias Luisito, Luigi y Care Hámster, que vivían en el sector del Túnel, de Chinchiná.

Por la caja fuerte

Pretendían robarle una caja fuerte a Mejía Hoyos, pero no contaban con que el abogado estaba armado. "Care Hámster era el campanero. La Mica, Luigi y Luisito ingresaron a hurtar. Cuando el abogado, que vivía solo, notó la situación, le disparó a la Mica. Los otros dos sacaron un arma de fuego e hicieron lo mismo con la víctima, a quien le robaron el revólver y una escopeta deportiva. Huyeron, vestían sudaderas oscuras y portaban pasamontañas", explicó un integrante de Policía de Inteligencia.

Tras individualizar a los otros tres sujetos, los investigadores determinaron que eran personas dedicadas al hurto. El operativo se montó desde las 10:00 de la noche del miércoles pasado, con hombres camuflados en la Isla Baja, Isla Alta y el centro del municipio. Fueron cinco allanamientos. A las 4:00 de la mañana del jueves les cayeron.

A Luisito no lo encontraron en la casa, pero un perro que acompañaba el operativo lo ubicó en una caleta situada en el techo de la vivienda. Era el cabecilla de la banda y hace seis meses estaba en libertad por un homicidio que cometió en el 2009 en Chinchiná. Luigi pagó una condena hace dos años por porte ilegal de armas y Care Hámster registra antecedentes por tráfico de estupefacientes.

Los judicializaron por homicidio agravado, porte ilegal de armas y hurto calificado y agravado. En el barrio El Túnel, donde vivían los detenidos, se dieron otras tres capturas, en unos allanamientos. Encontraron un arma de fuego, que será sometida a cotejo balístico para determinar si se usó en algún homicidio. Además, 60 dosis de estupefacientes, dinero en efectivo y dos celulares. Estas personas no tienen relación con la muerte del abogado.

La víctima

Samuel Rafael Mejía Hoyos tenía tres hijos: Juan Simón, María Antonia y Catalina. "Fue un gran ser humano, inigualable, una persona solidaria, honesta y jamás traicionó sus valores. Siempre estuvo pendiente de las necesidades de los habitantes de Chinchiná y, especialmente, de los del barrio La Frontera. Ejerció el derecho de manera intelectual, era un estudioso, pero en los últimos años se dedicó a vivir más tranquilo", manifestó Catalina.

El dato

Los capturados no aceptaron cargos, pero los mandaron para la cárcel La Blanca.

La cifra

16 capturas por homicidio en lo corrido del año en municipios diferentes a Manizales.