LA PATRIA | MANIZALES

A las 12:15 del día de ayer se escucharon varios disparos en la Galería de Chinchiná. Dice la comunidad que muchas personas corrieron de miedo a que las alcanzara una bala. Testigos afirman que escucharon seis tiros.

En Manizales también asesinaron esta semana a un menor de edad de una puñalada en el cuello. Al joven lo hirieron en el barrio El Carmen.

Acerca del hecho de Chinchiná, nadie ha dado pistas o una posible identificación del sicario que mató a Jhon Jairo Cardona Salazar. El cadáver quedó sobre el andén del bar Andariego. El informe inicial de inspección del cuerpo señala que tenía tres impactos de bala.

El Comandante del Distrito Chinchiná, coronel José Óscar Jaramillo Niño, comentó que la única información que se tiene del hecho es que el hombre salía de la residencia, donde al parecer vivía, cuando lo sorprendió el sicario y lo acribilló.

"Hasta el momento todo es materia de investigación. Además tenemos poca información del hecho", señaló el oficial.

De Cardona Salazar se conoció que era oriundo de Tuluá (Valle). Hacía pocos días había llegado al municipio cafetero.

Reportes extraoficiales indican que a Cardona se le veía en actividades de distribución de estupefacientes, por lo que presumen que su muerte fue por ajustes de cuentas.

Apuñalado en Manizales

Juan Camilo Moncada Quintero, de 17 años, murió en un centro asistencial de Manizales como consecuencia de una herida de arma blanca en el cuello. La agresión ocurrió el lunes a las 9:30 p.m. en el barrio El Carmen. Su muerte la certificaron el martes en la noche.

Una tía de Puchis, como le decían cariñosamente al joven, comentó que su sobrino no tenía problemas con nadie. Que era un muchacho muy casero, por lo que no entienden en la familia qué fue lo que le pasó. Quien lo vio por última vez con vida fue su abuela, con la que vivía en El Carmen. "Mi mamá dice que se lo encontró a las 9:00 p.m. Juan le pidió plata para una gaseosa, ella se la dio y le dijo que se entrara rápido", dijo la tía.

En el momento en que el joven estaba tomándose el refresco, lo atacaron. Nadie da razón de cómo fue ni por qué. La familia descarta un atraco porque tenía toda sus pertenencias. A la abuela le avisaron de los hechos minutos después, cuando a Puchis ya se lo habían llevado para el Hospital Santa Sofía. Allí entró a cirugía y permaneció varias horas entubado y con respirador artificial. El martes en la noche se complicó y falleció a las 10:00 p.m.