Aseguran que le dispararon por no entregar el celular

LA PATRIA | MANIZALES

Eran las 9:15 de la noche del pasado martes y al lado del colegio Integrado La Sultana, en la parte superior de los lisaderos, departían cuatro jóvenes. De repente, les llegó un sujeto por detrás y les apuntó con un revólver.

-Pásenme los celulares y todo lo que tengan. Los ponen en el piso, les dijo, al tiempo que les exigió que no lo miraran.

Dos le entregaron sus teléfonos de alta gama. Pero Rafael Naranjo, de 17 años, se negó. El presunto delincuente le apuntaba una y otra vez con el arma. "¡Páselo o se lo estallo, pirobo!"

En medio de sus nervios e impotencia, Naranjo se lanzó sobre el arma, pero fue recibido con un tiro.

La cuatro víctimas corrieron por la calle 66 con carrera 9A, dos hacia arriba y Juan Pablo, acompañado de Rafael Naranjo, en sentido contrario. El presunto ladrón les disparó dos veces más, pero no les dio. Huyó por la Bocatoma.

La angustiosa espera

Cuando Naranjo llegó a las afueras de una casa cerca al lugar de la agresión, en La Sultana, se desplomó. Juan Pablo pidió que llamaran a una ambulancia. El tiempo se hizo eterno y no llegaba el auxilio, por lo que intentó parar un taxi, pero no se detuvo.

Juan Pablo se paró de frente a la vía. A un taxista no le quedó otra opción que frenar para montar a Rafael y trasladarlo al Hospital de Caldas, mientras varios de sus amigos recorrían en un carro las calles de la zona buscando al agresor.

Hasta ayer, la víctima, que es aficionado al fútbol, permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos de ese centro asistencial.

Una víctima aseguró que el asaltante lucía chaqueta militar azul, era zarco, de piel blanca y de baja estatura. Al parecer, no es del barrio, pero cree que fue el mismo individuo que hace dos meses le robó el morral a una señora en el mismo sector, también usando un revólver.

El coronel Mario Fernando Guerrero, comandante de la Policía Metropolitana, indicó que esperan que el joven se recupere para que dé su versión. Indicó que manejan otras hipótesis.

"Los jóvenes dijeron que consumían marihuana. Otra versión es que manipulaban un arma de fuego o tenían alguna riña. Investigamos porque acá no es común que le disparen a alguien por robar un celular y menos a un grupo que esté consumiendo".