A alias Kikí lo acusan de asesinato

LA PATRIA | MANIZALES

Según Kikí, las 90 puñaladas que recibió Sandra Milena Gómez, La Tayson, a quien asesinaron en mayo del 2013 en el barrio San José, de Manizales, no fueron suficientes. Él no tuvo que ver con el crimen, pero probablemente sí con el de José David Casas, de 25 años, que ocurrió el 11 de diciembre del año pasado. Todo se dio por el comentario que hizo.

Según la investigación, el homicida contó delante de un grupo, en el que estaba su víctima, que la occisa debió haber recibido más puñaladas, mofándose del hecho. Esto llegó a oídos de la tía de La Tayson, que era la suegra del hombre asesinado. Por eso lo buscó, le reclamó por lo que dijo y le pegó una cachetada.

Al parecer, Kikí supuso que José David había sido el soplón y con un arma blanca lo agredió. En respuesta este lo buscó días después y con un arma de fuego lo hirió en un pie, pero lo capturaron en septiembre del año pasado y le imputaron cargos por porte ilegal de armas de fuego. Quedó libre, pero bajo investigación.

Y no pasó mucho tiempo hasta que Kikí buscó a Casas en Barrios Unidos y lo persiguió hasta descargarle tres disparos en la espalda. Alcanzaron a llevarlo a un hospital, y antes de entrar al quirófano le contó a su familia quién había sido su agresor. Luego falleció.

Había cambiado

A finales del 2010, José David estuvo en la cárcel por tráfico de estupefacientes, pero cuando salió conoció a Deisy, su esposa, y con quien convivió por dos años. Ella asegura que a José David su unión y su hijo, que ahora tiene 18 meses, le hicieron dar un giro en la vida, pues para evitar problemas consiguió trabajo como ebanista y se fue de La Avanzada, en donde vivía.

Hace 15 días, los investigadores del CTI de la Fiscalía capturaron al presunto asesino en la casa de su madre, en el barrio San Sebastián, en donde se presume que se escondía. Ante un juez no aceptó los cargos por homicidio y porte ilegal de armas, pero lo mandaron para la cárcel de Manizales.