LA PATRIA | MANIZALES
En la mitad de la quebrada Chupaderitos (Villamaría), cerca al colegio Granadino, quedó tendido el pasado domingo Alonso Ríos, de 86 años. El abuelo, guía de un grupo de personas de la tercera edad que realiza caminatas, se resbaló en una piedra.
Sebastián Rivera, bombero de Villamaría, explicó que el adulto mayor cayó cuando se paró sobre una piedra mojada. "Se golpeó, del lado izquierdo, contra el fémur. Los acompañantes nos llamaron y arrancó el rescate con el apoyo de una ambulancia y miembros de la Defensa Civil de Manizales y Villamaría", explicó.
En el camino se encontraron con inconvenientes. Por ejemplo, había dos puertas cerradas con candado. Una la abrió el propietario del predio, pero en la otra tocó tumbarlo, pues no apareció el dueño. Luego caminaron por medio de la quebrada en busca de Alonso.
"Llegamos y el señor estaba hipotérmico, tirado en la quebrada. Sus pies permanecieron mucho tiempo debajo del agua y por eso ya estaba entumecido", manifestó el bombero. Después de inmovilizarlo lo llevaron hasta la carretera y lo transportaron a Santa Sofía.
El grupo de caminantes recorre esta zona, pero por la quebrada. Después de lo ocurrido con Alonso reconocieron que es peligroso y tras las recomendaciones de los bomberos se comprometieron a hacerlo por la carretera.
Las piedras de los ríos y quebradas son lisas y redondeadas porque al ser arrastradas por la corriente y chocar unas contra otras pierden sus aristas.
Para ayudar en el rescate, el cabo Óscar Pérez prestó su vehículo personal. Se usaron dos móviles y además cuatro motos de la Defensa Civil.
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