Afrontará juicio por secuestro y robo en Risaralda (Caldas)

LA PATRIA | MANIZALES

Alias Bedoya, mecánico de 44 años, natural de Salamina, irá a juicio por los delitos de secuestro simple, acto sexual violento y hurto calificado y agravado.
La Fiscalía lo acusó por hechos acontecidos entre el 10 y 11 de mayo pasados en la vereda Pielroja, de Risaralda (Caldas). Varios sujetos ingresaron a un finca, amordazaron a los habitantes y se llevaron elementos avaluados en $7 millones.
Un adulto veía televisión, en compañía de su nieta, de 18 años, a las 7:00 de la noche. Un sujeto armado llegó a la casa y les dijo que los iba a requisar para ver si tenían armas. Lo llevó a la sala y en ese momento arribó un compinche. Encerraron al hombre y a la joven en el baño, desde donde escuchaban cómo revolcaban toda la casa.
Luego llegaron a la vivienda la esposa y el hijo del propietario, en una moto. A ellos también los metieron a un baño. Luego los trasladaron a la parte trasera y los aislaron en una ramada. Estuvieron encerrados unas ocho horas.
"Luego nos sacaron uno a uno para que entregáramos lo que teníamos. Nos obligaron a meter en una caja el dinero y las joyas", explicó el denunciante. Su hijo logró salir por una rejilla y pedirles ayuda a los vecinos.
Mientras tanto, los dos ladrones se llevaron un televisor, dos pares de zapatos, tres lociones, celulares, anillos de oro, ropa y la moto.   
Avisaron a los policías que, minutos después, detuvieron a un sujeto con varios de los elementos robados. Además, recuperaron la moto en el sector El Cairo, de Anserma.
Bedoya les confesó a los uniformados que cerca de un cañaduzal escondió el televisor, envuelto en cobijas y en una bolsa negra. Los llevó hasta el sitio.  
Luego de esto, la nieta del propietario de la finca les contó a las autoridades que los ladrones la llevaron a una habitación, la amenazaron con arma de fuego, la obligaron a desnudarse y le dijeron cosas obscenas.
En audiencia, Bedoya no aceptó cargos y lo mandaron para la cárcel de Anserma. El secuestro simple da entre 16 y 30 años de cárcel; el hurto y el acto sexual violento, entre 8 y 16 años, cada uno.