Dos heridos en Medellín al estallar vapeador

EL COLOMBIANO | LA PATRIA | MEDELLÍN

Dos jóvenes resultaron heridos luego de estallarles un dispositivo de vapeo, parecido a un cigarrillo electrónico.

Los remitieron a la Clínica las Américas, con lesiones severas en una mano y el otro con quemaduras importantes en la cara y uno de sus ojos, aunque ya se encuentran en recuperación. 

Aunque el incidente ocurrió hace dos semanas este sábado se conoció luego de unas fotografías que circularon en grupos de Whatsapp. El médico oftalmólogo, Pablo Garcés de la clínica Clofán, que trató a uno de los jóvenes de 21 años de edad, habló sobre lo ocurrido. 

“Inicialmente consultaron en la clínica Las Américas. Los jóvenes estaban fumando y cuando uno se lo pasó a otro el artefacto estalló. He buscado en internet y hay varios casos reportados de lesiones por estallidos incluso con pérdidas de dientes, fracturas, aunque no había encontrado uno con lesiones oculares”, afirmó el médico. 

Garcés agregó que el joven paciente que sufrió heridas en su cara y su ojo afortunadamente se recuperó. “No perdió el ojo, pero tiene un montón de cuerpos extraños metidos dentro de su ojo que no se pueden sacar. Puede que vayan migrando dentro del ojo o que se queden ahí. Aunque recuperó su visión en un 100%”, indicó. 

Por otro lado, el joven que sufrió las quemaduras y lesiones en una de sus manos habría tenido que cancelar el semestre de Gastronomía, mientras se recupera y puede volver a manipular objetos. “El otro muchacho el de la lesión en la mano lleva como cuatro cirugías plásticas para reconstruirle su mano”, agregó el médico. 

Los vapeadores son dispositivos con forma de cigarrillo que liberan nicotina a través de un calentamiento de un líquido mezcla de glicerina y alcohol. La mezcla se calienta hasta los 350 grados mediante una batería que se carga con un puerto USB y la persona aspira a través de una boquilla. 

“El riesgo de esto es que está súper de moda en los adolescentes y sin consentimiento de los papás. Son productos chinos, de los que deben haber de buena calidad y otros de dudosa, pero Medellín está lleno de tiendas de eso”, concluyó Garcés.