MARTHA LUCÍA GÓMEZ

LA PATRIA | MANIZALES

"Como presidente del Congreso, no lo pueden medir a uno por el número de leyes que presentó, porque dirige toda la legislatura y no le queda mucho tiempo. Fue una legislatura histórica". Con estas palabras empieza esta entrevista el senador Mauricio Lizcano Arango, que hoy concluye su periodo en este cargo.

Da cuenta de 70 leyes aprobadas en un año, 19 debates de control político y 97 plenarias. "En la historia del Congreso nunca se había tenido este récord. El año de más leyes aprobadas era de 57 y de más plenarias 67", insiste.

Otros logros

Del presupuesto del Congreso le sobraron $8 mil millones, dinero que devolverá a las arcas del Gobierno Nacional. ¿Qué hizo para alcanzar ese ahorro?

Toda la contratación se la entregamos al portal Colombia Compra Eficiente, no manejé un solo peso, y fue hecha por subasta inversa. Por ejemplo, servicio de cafetería se lo ganó el mismo que traía el contrato, pero con $30 millones menos al mes.

En su rendición de cuentas en Bogotá mencionó actividades dirigidas a la comunidad, ¿en qué consisten?

Hicimos 16 foros cada 15 días en las regiones, escuchando a los colombianos; tuvimos el programa Yo represento, donde por lo menos mil 500 estudiantes fueron todos los jueves al Congreso a simular que eran congresistas y aprender de política. Creamos la aplicación gratuita Mi Senado, con 55 mil descargas, que permite ver cómo vota cada senador.

¿Esta aplicación maneja datos abiertos del Congreso?

La aplicación nos permitió aumentar la asistencia y la permanencia de los senadores, cuando llegué estaba en 57% y terminó en 70%, e hicimos un plan de datos abiertos a través de un concurso, para contarle a la gente, por la página web, cómo se hacen las leyes, conflicto de intereses y asistencia.

Traspié

¿Cómo terminan sus relaciones con los ministros?, con algunos tuvo fuertes discusiones, como con Mauricio Cárdenas, de Hacienda.

Nada es personal, uno defiende es al país y a las instituciones. Lo que ocurrió fue institucional porque no estoy de acuerdo con que no se sancione la ley de los pensionados, es un compromiso del presidente Santos que tiene que honrar; no estoy de acuerdo con que objeten mi ley de reducción de las semanas de cotización para las mujeres, porque ayuda a que se puedan pensionar. De las 70 leyes que hicimos, el gobierno solo objetará tres, menos del 5%. En ese orden de ideas las relaciones terminan bien.

 ¿Se equivocó al creerle en primera instancia al exsubsecretario del Congreso, Saúl Cruz, cuando dijo falsamente que había sido violentado por un camarógrafo de Noticias Uno?

A la gente hay que creerle, pero no me equivoqué. El Congreso fue el que recolectó las pruebas, el que hizo la resolución de sanción para él por orden de la Procuraduría. Si hubiera sido por el video de Noticias Uno nunca hubieran podido desenmascarar a Saúl Cruz. Tomé los videos del Congreso, los investigué y los entregué al noticiero y a la justicia, y demostré que él mentía.

Paz histórica

¿Considera que pasará a la historia por las leyes aprobadas por fast track (vía rápida) para el proceso de paz, o le restarán popularidad para su carrera política por la gente que hay en contra?

Uno debe aprender, cuando está en funciones públicas, que no siempre lo correcto es popular, que si uno se deja guiar por los cantos de sirenas termina no tomando las decisiones correctas. Lo más fácil era seguir atacando a las Farc, a unas personas que le han hecho mucho daño al país, porque el país odia a las Farc. Lo difícil fue lo que hicimos.

¿Qué hicieron?

Construir una verdadera salida negociada al conflicto e implementarla a través de una Justicia Especial para la Paz, una amnistía, una reincorporación política, una cláusula de cumplimiento, prohibición al paramilitarismo. Y lo hicimos bien, mejoramos muchas cosas que estaban acordadas. Estoy muy feliz de haber hecho lo que hice en el Congreso y sí vamos a pasar a la historia por acabar un conflicto de 52 años. Se tuvieron mecanismos como el fast track que nunca se habían hecho, que refrendaron la paz. La palabra Farc terminará desapareciendo en la historia de Colombia y quedará la paz y la reconciliación. Estoy muy orgulloso de lo que hicimos.

¿Cómo ve este proceso de paz en 10 años?

Los resultados van a ser muy positivos. Tenemos 48% de turistas más en Colombia, eso es producto de la paz, nadie venía a un país donde había un conflicto interno. Cuando el Hospital Militar no está lleno de soldados muertos, eso es un gran resultado. En 10 años la gente lo va a ver muy bien, como ve bien la paz con el M-19, hace 25 años se oponía.

¿Si ve tan positivo el proceso de paz, por qué impidió ingresar a miembros de las Farc y del Eln a un congreso de paz?

Por qué como legislativo tenemos autoridad moral y aquí las Farc tienen que cumplir. Tenemos que estar encima de que se cumpla todo lo que se firmó, sea bueno, regular, y algunas veces malo. Las Farc no habían entregado las armas y no podía dejarlas entrar al Congreso. El fin último del proceso de paz es desligar las armas de la política. Ya entregaron las armas y seguramente podrán entrar al Congreso. Si las Farc no entregan todos los menores ni todos los bienes producto del narcotráfico seré el primero en levantar la mano a decir que esto quedó mal o si las Farc no cumplieron, pierden los beneficios y se tienen que ir para la cárcel. Guerrillero que no indemnice a las víctimas, que no deje las armas, que no cuente la verdad, se va para la cárcel de 15 a 20 años.

De política

¿Qué futuro le ve al Partido de la U. en el que milita, pues hay personas buscando espacio en otros movimientos como Cambio Radical?

Los muertos que vos matáis gozan de buena salud. Es decir, la U. es un Partido sólido, y mucha gente quiere decir que está destruido. Somos la primera fuerza política, por encima del Centro Democrático, de Cambio Radical; tenemos la mayoría de diputados, un número importante de gobernadores, la bancada más grande de Senado y Cámara.

¿Piensa que esto seguirá igual para las elecciones del 11 de marzo del año entrante?

El Partido va a seguir, requiere unas modificaciones. Seguramente hay que sacar a Armando Benedetti de la Presidencia y poner un presidente independiente, que no compita con los demás senadores. Hemos propuesto a Aurelio Iragorri, el ministro de Agricultura. Ahora no hay partido que se salve de la crisis. Los liberales tienen dificultades con sus candidatos presidenciales, los conservadores también, incluso el Centro Democrático, que tanto se aplaude, no tiene candidato presidencial. Esto quiere decir que la democracia está en un reacomodamiento de cara a las elecciones.

¿Ya resolvió las diferencias con Benedetti y con el representante a la Cámara Hernán Penagos?

No es nada personal, es simplemente la visión de la política que no compartimos. La democracia es el producto del debate de las ideas. No sé por qué en Colombia, cuando uno piensa diferente es porque está peleando. No pienso igual al senador Benedetti, no me gusta como hace las cosas, y tengo derecho a decirlo. Con Penagos, he dicho que él jugó sucio para la Alcaldía de Manizales, jugo a doble quimba, a Octavio y a Luis Roberto, y no estoy de acuerdo con eso.

Investigaciones que le han abierto

- La Procuraduría General de la República le abrió una indagación preliminar por la compra de la finca Guamerú, propiedad de su familia, que tiene líos de tierras y hasta de desaparición forzosa.

"Me notifique, y ¿sabe qué es la investigación?, un recorte de El Espectador y una noticia de la revista Semana. Ahí no hay nada. Fuimos compradores de buena fe de una tierra que no tenía problemas. Estamos tranquilos".

- Lo señalan de supuestamente influir para que la Carder y el Invías le dieran una licencia para abrir una estación de gasolina en ese predio.

"Como congresistas, según la Ley 5ª, podemos solicitar permisos en igualdad de condiciones a todos los ciudadanos. Eso fue lo que hicimos. Lo hemos dicho una y 100 veces. El permiso para una estación de gasolina, en promedio, lo dan en dos años, y a nosotros el Invías no nos lo dio. Entonces, qué tráfico de influencias. No conozco al director de la Carder ni nunca me he reunido con él, no hago política en Risaralda. El predio está dedicado a la ganadería".

- Tiene investigaciones en la Corte Suprema por presunta participación en parapolítica e influencia con grupos del narcotráfico para financiar campañas pasadas.

"Son investigaciones que llevan siete años, que están en indagación preliminar, y llegaron de un anónimo. Pedimos que nos la cierren. Ahí no hay nada".