A partir de hoy se realiza en Cali la XII Cumbre de la Alianza del Pacífico (AP), esquema de integración en el que participan México, Perú, Chile y Colombia, y que de acuerdo con datos de FDI Markets, desde su creación en el 2012 hasta la fecha ha registrado 3.741 proyectos de inversión por 240 mil 512 millones de dólares, en buena medida provenientes no solo de países con costas en el Pacífico sino también de Europa y otras zonas del mundo. De hecho, de acuerdo con el Banco Mundial, el 43% de los cerca de 85 mil millones de dólares que llegan cada año como inversión extranjera a América Latina se invierten en los países de la AP.
Ahora que Colombia asume la presidencia Pro Témpore de este organismo es mayor el reto que tenemos de lograr que ese instrumento de integración y cooperación se traduzca en más empleo, mejores herramientas tecnológicas y mayor dinámica en el crecimiento de la economía. Hasta el momento la AP ha significado para nuestro país la creación de 106 mil 707 puestos de trabajo en proyectos muy específicos llegados principalmente desde Estados Unidos, España, Francia y Chile, de acuerdo con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, pero los beneficios no llegan aún a las cifras esperadas. Los países de la zona a los que mejor les va hasta ahora son México y Chile.
También es necesario que inclusive los otros países miembros de la AP traigan más proyectos a Colombia, aprovechando las facilidades de intercambio con que se cuenta ahora. Desde Chile han llegado las iniciativas más numerosas y con mayor capital, con inversiones cercanas a los 1.630 millones de dólares, pero desde Perú por ejemplo solo se han logrado atraer inversiones por 241 millones de dólares. Ahora bien, estos indicadores van en crecimiento progresivo, pasando de 690 millones de dólares desde los otros países de la AP en el 2015 a 715 millones de dólares en el 2016, invertidos principalmente en los sectores financieros, de electricidad y agua, de industria y de comercio.
Todavía falta mucho por hacer para lograr una mayor libertad y flexibilidad en la circulación de personas, capitales, servicios y bienes entre los cuatro países, y la gran expectativa es que en la reunión de Jefes de Estado de mañana se puedan concretar mayores avances en ese sentido. Sin embargo, el mayor reto es poder llegar como un bloque fortalecido a conquistar mercados asiáticos que actualmente son atractivos para ofrecer nuestros productos, sobre todo en el bloque Asia-Pacífico. En ese sentido la experiencia de tener siete embajadas compartidas les ha permitido a los cuatro países consolidar contactos con países con los cuales antes no había ninguna interacción.
Es muy importante que se esté apuntando a mejorar los convenios alrededor de la educación y del impulso a las micro, pequeñas y medianas empresas, así como el interés por los avances en ciencia, tecnología e innovación, que son áreas a través de las cuales se pueden tener repercusiones sociales bastante significativas. El hecho de que haya 52 países observadores evidencia el interés que ha despertado el trabajo de la AP en sus pasos de integración profunda, y abre las puertas a una ampliación de las redes comerciales con el resto del mundo. De hecho, el encuentro empresarial previo a la reunión de los presidentes podrá llevar a conclusiones muy favorables en materia comercial y de inversión.

Regiones como el Eje Cafetero que tienen cercanía con la salida hacia el Pacífico debería buscar involucrarse más en las posibilidades que brinda la AP. Con seguridad Cali y el Valle del Cauca, aprovecharán este encuentro para encontrar alternativas de intercambio comercial que apunten a dinamizar su economía regional.