Tecnicafé en Cajibío Cauca, es una iniciativa liderada por Supracafé, en asocio con la gobernación del Cauca, Crepic del Cauca, Universidad del Cauca, Asociación de mujeres caficultoras del Cauca, Comité Departamental de cafeteros, Multiscan del España y Federación para establecer un centro de innovación y emprendimiento que permita que el conocimiento científico pueda ser transformado en oportunidades de negocios y valor. El centro transfiere tecnología para el mejoramiento de la calidad. Por otro lado convenios con organismos internacionales como el CQI (Coffee Quality Institute) imparten educación a productores, catadores, tostadores y baristas en las prácticas necesarias para producir y llevar hasta la taza una óptima calidad, llenando un vacío del sector, que no tenía una fuente de conocimiento y formación en calidad y agregación de valor. 
En una política de puertas abiertas, su director, César Echeverri, ha sido un abanderado de la necesidad de capacitar los miembros de la cadena para escalar en la posibilidad de "descommoditizar" nuestro grano. Permanentemente abren cursos y convocatorias con programas de formación, concursos de calidad, visitas de clientes y subastas que han fortalecido la oferta exportable de cafés de alta calidad del sur del país. Sus eventos, por ser iniciativa privada, en asocio con organismos gubernamentales e internacionales, obviamente y legítimamente, tienen un costo considerable para la mayoría de nuestros productores, incluso empresariales.
Por otro lado, en los últimos meses, se viene socializando una discusión sobre qué utilidad darle a la Fundación Manuel Mejía en Chinchiná, otrora centro de formación para trabajadores del sector cafetero. Esa infraestructura, ubicada en un sitio estratégico del país, podría ser epicentro de un "Instituto para la calidad del café", liderado por Federación, donde confluyan estamentos de la institución, el estado y privados para crear un centro académico de formación en alta calidad para productores. En Caldas tenemos a Cenicafé (con personal doctorado en quienes los productores hemos invertido mucho dinero), el Comité Departamental de Cafeteros de Caldas (con su laboratorio certificado), el Sena (con su escuela de calidad), la Cámara de Comercio, la Gobernación (que ha estado comprometida con estas iniciativas), alcaldías, comercializadores internacionales de cafés especiales (que tienen su sede en Caldas), Cooperativas del departamento y productores privados de café de alta calidad, comprometidos con la generación de valor, para que mancomunadamente estructuren un centro de desarrollo que le sirva al departamento, a la región y al centro del país cafetero. Una iniciativa de este orden debe entender que el conocimiento, la tecnología, la logística y la comercialización del café especial es diferente en tiempo y en espacio a la del café corriente.
En las instalaciones de la Fundación se podrían organizar laboratorios de investigación, centros de capacitación, alojamiento de estudiantes y eventos comerciales llevando clientes, aprovechando su infraestructura y la oferta hotelera de la región. Confluiría allí la caficultura del Paisaje Cultural Cafetero, Antioquia, norte del Valle y Tolima lo cual fácilmente lo convertiría en la mayor oferta exportable del país.
Posicionar un origen diferenciado requiere inversión, apoyo institucional, privado y del gobierno en forma articulada, desprendida de intereses particulares, vanidades y protagonismos; Caldas tiene todos los elementos necesarios para convocar y avanzar en iniciativas de generación de valor, el reto es articular los esfuerzos, que los liderazgos sean focalizados hacia objetivos superiores en beneficio del productor. Lo que cada centro investigue es su patrimonio y secreto, no pretendamos que todo lo que los demás investigan nos lo van a transmitir, debemos hacer nuestro propio desarrollo y el acelerador de emprendimientos lo tenemos disponible ante nuestros ojos, solo hay que armarlo. Como me dijo un extensionista amigo muy brillante: "no hay que generar dependencia, hay que crear habilidades".