Qué semestrico tan movido este, en un solo guascazo y a palo seco, dos de los momentos más esperados de cada quinquenio, me refiero a las elecciones presidenciales y al Mundial de Fútbol. A sabiendas de que estamos mamaos de la repetición de la repetidera, que si Falcao está bien, que James se resfrió, que los que juegan en Argentina la embarraron, que a los unos los recibieron por debajo de la puerta, por pena o por falta de coherencia, o que si Fajardo, Claudia y Robledo se pusieron de acuerdo, que escondieron a Ordóñez por afectación reputacional a tal campaña, que fulano de tal está muy pollo o que la pregunta hecha “es muy chimba”. Por esto no hay opción de hablar de otra vaina, so pena de quedar como Davivienda.

Se terminó la contienda política y pasamos a 8vos, estamos a medio camino del Mundial, soy muy honesto al confesar que no soy experto, ni en lo uno -la política-, ni en lo otro -el fútbol-, sin embargo trataré de esbozar mis teorías y opiniones en relación a tan trascendentales temas:

Dos conductores, definidos y en ejercicio de funciones, Péker-man y Duquer-man son los líderes de los procesos, en lo futbolístico y en el ejercicio de Gobierno que inicia el próximo 7 de agosto, el primero con conocimiento, capacidad y gran experiencia, el segundo más preparado que un Kumis de botella de vidrio, los dos con retos para superhéroes, con tareas y entregables de complejísimo éxito, enfrentados a “enemigos” sorpresivos, solapados y plagados de intereses.

En lo futbolístico, ganar, jugando vistosamente y con solvencia, como contra Polonia, es la tarea de Péker-man y sus pupilos y para esto, los creativos, los ejes del equipo, los líderes natos… a Falcao, James y Ospina les asiste esta responsabilidad.

Haciendo una mezcla de temas, a ellos, como líderes les entregaría la paz, creo que es el tema fundamental, el eje central y el más importante en la agenda del país. Sé que lo definido en el acuerdo es imperfecto, dista mucho del querer mío, pero quién dijo que la negociación era con las hermanitas de la caridad, quién dijo que la contraparte eran bobitos, la sentada fue con expertos bandidos, con delincuentes de la más excelsa calidad, cabe decir como reza el adagio “lo perfecto es enemigo de lo bueno”.

A Duquer-man le cayó la obligación de garantizar este camino y su exitoso cierre, de manera oportuna y bendecida, a partir de la gobernabilidad con que asume su cargo, basada en el histórico apoyo de 10 millones de votantes, tendrá la capacidad de hacer ajustes, apretar tuercas, corregir y limitar alcances inapropiados del acuerdo definido, debe hacerlo, con respeto a la palabra empeñada y sobre todo, “sin hacer trizas” el proceso y con ello, la esperanza de muchos colombianos, entre los que me incluyo. Es pertinente resaltar que casi 9 millones de pares de ojos, más los de los abstencionistas, estarán atentos y en muchos casos ávidos de ejercer una férrea oposición y una crítica destructiva, como la sufrida en los últimos años por el gobierno actual.

El proceso se ha tramitado, el conflicto lleva casi 70 años, muchos aportaron su granito de arena para llegar al punto en que nos encontramos, a finales de los 90, se desgastó la reputación de los malandros, en la primera década de este siglo, en términos futboleros, “los metimos entre los palos y los fregamos”, los apretamos por la fuerza y quedaron listos para una negociación, posteriormente, en esta década, se adelantó la negociación, se pactó y se inició la implementación de un acuerdo imperfecto, como todos, pero igualmente importante, lleno de esperanza y de positiva expectativa.

A los volantes creativos, los carrileros y a los otros delanteros, les endosaría otro tema de la mayor trascendencia, la reconstrucción del sistema de justicia, dicen que un país sin justicia es un país inviable, un Estado fallido, esta es la garante de una sana convivencia, es la generadora del orden y el respeto. Se debe garantizar y retomar la independencia total de los poderes, al igual que la existencia de los pesos y contrapesos, de lo contrario caminamos hacia imprudentes espacios dictatoriales, que engolosinan a tanto dependiente psiquiátrico del poder.

Por último y sin ser menos importante, le deposito con toda la confianza y convicción de éxito a la "Roca" Sánchez - que Dios no permita que lo expulsen, a Cristian Zapata, Jerry Mina, a Abel y a los “Patas Bravas”, incluso si se pudiese, reviviría a Barrabás, al Holandés Robert Masnick o a Leonel para que ayuden en la destrucción y el extermino de la corrupción. Siendo exitosos en el manejo de esta variable, aparecerán los recursos económicos para construir el país que queremos. Turbay hace 40 años dijo que la corrupción existe en sus justas proporciones y los Nule, aseguraron que la misma es inherente al ser humano, prefiero que no sean estos personajes nuestros filósofos de cabecera, para eso tenemos a Pambelé y a Maturana. Vuelve y juega, para este tema, debe garantizarse la independencia total de las IAS, que sus representantes no sean elegidos por el Legislativo, que tampoco sea el Ejecutivo el que haga los guiños, sin probidad técnica, moral y ética en estos espacios, el futuro es negro.

Este equipo bien aceitado, ojo no vaya a leerse enmermelado, atendiendo estos puntos que considero relevantes, acelerará el andar en un camino de prosperidad y justicia social.

Y por último, en mi humilde opinión, tiene Duquer-man, el mejor jugador o más bien la más capaz de las heroínas, tiene en su equipo a Marta Lucía, quien cuenta con inteligencia, preparación, experiencia, pantalones, criterio y ponderación para ser una de las grandes estrellas del equipo para este cuatrienio que empieza, qué bueno sería que le permitieran extender su capa y poder actuar y aportar en la construcción de ese mejor país.

PD: No sé, si se hace o si está implementado y lo digo por desconocimiento y porque creo que para qué inventar lo inventado, a Al Capone, lo cogieron y lo condenaron por evasión de impuestos y era un re-malandro. Siempre he soñado, que las IAS con su experticia y capacidad, se dediquen a cruzar tanta y tan importante información económica existente y le lleguen al testaferrato de la corrupción, apúntenle a las relaciones familiares de los sospechosos, o más bien de todos los colombianos que tengamos cercanía con el poder y con manejo de recursos públicos, esculquen los patrimonios y los activos, como dicen en los medios judiciales, hasta el 4º grado de consanguinidad, 4º de afinidad o 1o civil y verán la cochinada que encontrarán. Para ejemplo un botón, el caso del exgobernador de Cundinamarca, que le apretaron a su señora y entiendo, cantó hasta en arameo.