Grandes cadenas, desafío para el comercio tradicional

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NEGOCIOS | LA PATRIA

La llegada de grandes cadenas comerciales a los municipios de Caldas le pone un gran reto al comercio tradicional: mantenerse en la competencia. Un sondeo hecho por NEGOCIOS en tres municipios de Caldas indica que los tenderos y propietarios de supermercados locales sienten la dura competencia que trazan las grandes compañías.

En Anserma, pese a la resistencia que planteó el comercio, quejándose ante la Alcaldía, se vieron obligados a vivir con la competencia y a crear estrategias para enfrentarlos. Para Fenalco, el fenómeno es normal, pues no se pueden blindar las ciudades o municipios para frenar la llegada de las competencias. "Lo que tiene que hacer el pequeño comerciantes es evaluar lo que está haciendo y si ve errores, solucionarlos", explicó la directora de Fenalco en Caldas, Gloria Patricia Arias Pimienta.

Los comerciantes señalan que tienen reducción de ventas incluso hasta del 50%, razón que generó el cierre de algunos establecimientos, como el de Beatriz Arias, quien después de 23 años tuvo que sellar el granero La Mazorquita. Según ella, es una lucha desigual, porque para cumplir con los impuestos es más complejo que antes, los clientes ya no los visitan. "Decidí cerrar impulsada por la crisis y la reducción en las ventas", resaltó.

Fenalco sostiene que la cercanía y el diálogo entre tendero y cliente es una fortaleza ante las grandes competencias. "El tendero es como un amigo y ayuda a elegir los mejores productos ", asegura. Agregó que las ventas por unidades y el fiado son las ventajas que tienen los tenderos.

Cercanía y domicilios, las estrategias

En Chinchiná el caso es similiar. De acuerdo con Ana Isabel Ríos, habitante del municipio, las grandes cadenas ofrecen los productos más baratos, por la capacidad que tienen de comprar en grandes cantidades, mientras que los tenderos solo pueden adquirir mercancía para abastecer sus negocios para una o dos semanas. "Es lógico que a los tenderos se les disminuyeron las ventas, porque los clientes buscamos mayor economía", señaló.

La tradición es la carta más fuerte de los tenderos para enfrentar la competencia. Los consultados destacan que la cercanía, el diálogo y los domicilios están entre sus apuestas para enfrentar la competencia. Sin embargo, esto no ha sido suficiente, pues en Anserma el autoservicio La Amistad tuvo que fusionarse para mantenerse.

Para Germán Aristizábal, de Chinchiná, los grandes supermercados, al tener la capacidad de ofrecer promociones y descuentos, ponen un piso muy alto para que la competencia de los tenderos sea efectiva. "Están acabando con las tiendas de barrio", reflexionó.

Se resisten a morir

De acuerdo con José Ossa, propietario de la Miscélanea Tamayo, ubicada en el barrio San Jorge de Manizales, las tiendas se enfrentan a la competencia entregando otros valores agregados. "Nunca se va a acabar la tienda del barrio, porque estamos a pocas cuadras de la casa del cliente y no tiene que hacer grandes desplazamientos", sostiene.

El llamado de los gremios es a no desfallecer como empresarios y más bien pensar en innovar en servicio, atención y variedad de productos.

En Viterbo

* Alexánder Novoa

Vinieron a llevarse lo poquito que hay. No es tan barato como dicen, además no atienden bien.

* César Acevedo

Las grandes cadenas no le compran a los productores locales, todo lo traen del otro lado.

* Cristian Camilo Gómez

Nos queda un poco difícil competir, pero ahí vamos. Ellos atraen a la gente con promociones y cosas de esas.

* María Isabel Pulgarín

He ido a los almácenes de cadena y encuentra uno cosas muy frescas, aunque los precios no es que sean como dicen.

En Chinchiná

* Gustavo Castañeda

Los pequeños comerciantes se han visto muy afectados con la llegada de estos almacenes. Se bajaron las ventas.

* Beatriz Orrego

Hay mucha competencia en el mercado, están acabando con las tiendas pequeñas. Los comerciantes no tienen con qué competir.

* Ana Isabel Ríos

Estos supermercados dan sus productos a muy bajo costo y eso beneficia al consumidor, pero a los tenderos se les disminuyeron las ventas.

En Anserma

* Felipe Marín

Llevo más de 40 años vendiendo al detal y al por mayor, la verdad es que a mí poco me ha afectado, la gente acude a estos nuevos supermercados a comprar promociones. Las deserciones de los clientes son muy esporádicas.

* Luz Dary Vélez

Por supuesto que a los tenderos nos afecta y mucho. Las ventas se redujeron más de un 50%. La gente compra en esos supermercados grandes mayores volúmenes.

* Evelio Ocampo

Nos están afectando y mucho, en mi caso dejé de vender frutas, porque en esos nuevos supemercados venden a precios que yo no puedo ofrecer y los clientes se van.