Río Magdalena sigue en crisis

La ciénaga de Zambrano también desapareció y los pescadores y campesinos piden alternativas para poder subsistir.

Joaquín Medina Arrieta, un pescador de 65 años, asegura que desde que comenzó con este oficio, hace más de 40 años, nunca las aguas del río Magdalena habían faltado en esa zona de la población con la agudeza que se vive hoy día.

La sequía generada en el Magdalena y la Ciénaga de Zambrano (Bolívar) por el Fenómeno de El Niño, afecta seriamente a las familias más vulnerables de este municipio, sobre todo a los que dependen de este oficio.

“Llevamos meses sacando uno o dos peces por día. Estos solo los cogemos para el sustento de nuestras familias. El año pasado, como hasta el mes de julio, hasta cien pescados cogíamos en una noche”, dijo el hombre.

Agregó que la falta de agua en el río afecta todo, porque no le llegan las corrientes a la ciénaga, generando la muerte de la tarulla, una planta que se sostiene en el agua y que según los pescadores la protege de la sequía.
El pescador resaltó que en las playas que se han formado en el río siembran yuca, maíz y ajonjolí, pero eso tarda unos meses en dar cosechas, y mientras eso pasa se están quedando sin qué comer.

Otro de los afectados es el pescador Ildo Contreras Ospino, quien explicó que ahora deben trabajar en lo que salga y fuentes de empleo son muy escasas, lo que está afectando a sus hijos.

SIGUE CRISIS POR EL RÍO MAGDALENA
15 Febrero 2016  10:26

CARTAGENA (El Universal). La ciénaga de Zambrano también desapareció y los pescadores y campesinos piden alternativas para poder subsistir.

Joaquín Medina Arrieta, un pescador de 65 años, asegura que desde que comenzó con este oficio, hace más de 40 años, nunca las aguas del río Magdalena habían faltado en esa zona de la población con la agudeza que se vive hoy día.

La sequía generada en el Magdalena y la Ciénaga de Zambrano (Bolívar) por el Fenómeno de El Niño, afecta seriamente a las familias más vulnerables de este municipio, sobre todo a los que dependen de este oficio.

“Llevamos meses sacando uno o dos peces por día. Estos solo los cogemos para el sustento de nuestras familias. El año pasado, como hasta el mes de julio, hasta cien pescados cogíamos en una noche”, dijo el hombre.

Agregó que la falta de agua en el río afecta todo, porque no le llegan las corrientes a la ciénaga, generando la muerte de la tarulla, una planta que se sostiene en el agua y que según los pescadores la protege de la sequía.
El pescador resaltó que en las playas que se han formado en el río siembran yuca, maíz y ajonjolí, pero eso tarda unos meses en dar cosechas, y mientras eso pasa se están quedando sin qué comer.

Otro de los afectados es el pescador Ildo Contreras Ospino, quien explicó que ahora deben trabajar en lo que salga y fuentes de empleo son muy escasas, lo que está afectando a sus hijos.

“Los niños no los estoy mandando a estudiar porque hay días en que no tenemos ni para el desayuno y aún el complemento alimentario que les dan no ha sido contratado, según nos informaron varios profesores” dijo Contreras.

ENTREGA AYUDAS

La Alcaldía, a través de la calamidad pública que fue decreta en enero y con el apoyo de la Gobernación de Bolívar, abastece a las comunidades de la zona rural con carrotanques de agua para el consumo humano.

En cuanto a la problemática que enfrentan los pescadores, la secretaria de Gobierno de Zambrano, María Eloisa Ríos, señaló que realizan mesas de trabajos con ellos, para concertar el tipo de ayudas que les pueden entregar.

Ríos dijo que otro de los problemas que afecta a la ciénaga es que los propietarios de grandes extensiones de tierra tanto en El Carmen de Bolívar como en Zambrano, le han taponado los cruces del arroyo Alférez, que iba a desembocar en ella, por esta razón tampoco está recibiendo agua suficiente.

Indicó que le solicitaron a Cardique apoyo para atender la sequía que está presentando actualmente la ciénaga, sitio de trabajo de muchos habitantes de esa población, y para la construcción de pozos profundos en la zona rural.

También expresó que debido a lo complejo de la situación, y a la poca captación de agua para el funcionamiento del acueducto municipal, tuvieron que iniciar un racionamiento en algunos barrios del municipio.