Los ángeles que cuidan la memoria de Tumaco

Nelson Alfredo Hernández
COLPRENSA | LA PATRIA | Bogotá

La Diócesis de Tumaco fue galardonada con el Premio Franco Alemán de Derechos Humanos – Antonio Nariño, gracias a la labor ejecutada desde hace más de 12 años por su Comisión de Vida, Justicia y Paz.

Esta comisión fue creada en respuesta a la crisis que comenzó en un municipio donde la gente humilde vivía pacíficamente, pero que, tras la llegada del narcotráfico, quedó sumida en la violencia y la pobreza extrema.

Karen Quintero es una habitante de la localidad, humilde como toda la gente de allá, con la particularidad que al verse inmersa en tales dificultades encontró que lo solución era empezar a trabajar con la Comisión de Vida, para ayudar a las otras personas de su región.

Ella, que actualmente coordina el trabajo de la Casa de la Memoria de Tumaco, fundada en septiembre de este año, bajo el ala de la Comisión de Vida, habló con Colprensa y contó su experiencia de trabajo.

Defensa del territorio

- ¿Cómo surge la idea de conformar la Comisión de Vida, Justicia y Paz?

Veníamos trabajando desde la pastoral social de la Diócesis hace algunos años. Sin embargo, la Comisión la empezamos en el 2001, cuando la hermana Yolanda Cerón, quien la dirigía en ese entonces, fue asesinada en la puerta de la parroquia en el centro del pueblo. Ese es un crimen que todavía sigue en la impunidad.

- ¿Qué temas trabajaban desde la pastoral social?

Desde la pastoral se venía haciendo trabajo de la defensa de los Derechos Humanos, de los territorios de las comunidades afrodescendientes, todo el tema de la Ley 70 (de las comunidades negras) y la titulación de los territorios colectivos de afros y de los indígenas.

- ¿Hay indicios de quién asesinó a la hermana Yolanda?

Durante las audiencias del proceso de Justicia y Paz, en la Fiscalía, el señor Guillermo Pérez Alzate, alias ‘Pablo Sevillano’, exintegrante del bloque Libertadores del Sur, de la Autodefensas Unidas de Colombia, confesó que fueron los paramilitares quienes perpetraron este asesinato, porque la Hermana había sido catalogada como guerrillera.

- ¿Entonces por qué dice que el crimen sigue en la impunidad?

Porque, los paramilitares tiraron del gatillo, pero detrás del asesinato de ella había muchos intereses ocultos. Ella defendía los territorios de las comunidades negras y este territorio es muy apetecido, debido a su ubicación geográfica y el corredor que representa en cuanto a la conexión con otros países (Ecuador y Perú) y con el Océano Pacífico.

- ¿Apetecido por quiénes?

Es muy apetecido por actores ilegales como la guerrilla, los paramilitares y los narcotraficantes, porque es una zona ideal para sacar drogas ilícitas a otros países, pero también hay actores legales que quieren meterse en esa zona, por su posición estratégica.

- ¿Quiénes son esos actores legales?

Gente que quiere que esa tierra sea para ellos y no respetan que es un territorio de nosotros, los afrocolombianos.

Memoria

- Vamos a un tema más reciente. En estos años, ¿cuál es su orgullo más grande trabajando en la comisión?

Me siento orgullosa de muchas cosas. Aquí hay gente que sufre mucho y el solo hecho de tratar con la gente, escuchar sus problemas, ayudarlos a superarlos es algo muy bonito. También me gusta la posibilidad de visibilizar el tema del conflicto en nuestra región. Darles voz a las víctimas y realizar diferentes acciones por la vida son cosas que nos llenan de orgullo. Pero el logro más reciente fue el establecimiento de la Casa de la Memoria, el 19 de septiembre de este mismo año. Allí guardamos los recuerdos de las personas que han sido víctimas del conflicto armado en nuestra región durante los últimos 20 años.

- ¿Qué significa ganar este premio, luego de los años que llevan trabajando?

Es una oportunidad para visibilizar lo que estamos haciendo, lo que ocurre en el municipio: la violencia, la pobreza, el abandono del Estado. Cuando nos entregan un premio como éste sabemos que nuestro trabajo es reconocido y nos motiva a seguirlo haciendo.

Violencia
Karen Quintero reconoce que el principal problema que tienen en Tumaco es la violencia, por eso guarda una esperanza porque si se firman acuerdos de paz con las Farc y el Eln la situación de Tumaco va a mejorar. Aún así destaca que esto no debe venir solo. “Tiene que haber un acompañamiento del Gobierno en todos los sentidos, porque aquí nos hace falta el servicio de salud, salud de calidad, acceso a la educación. Necesitamos que los servicios básicos como el agua y la electricidad sean constantes y no se interrumpan cada vez que hay un derrumbe o un atentado”.

Destacado

“La paz está bien y la necesitamos, pero con ella, todo tiene que mejorar”.