En medio de confrontaciones verbales iniciará nuevo ciclo de diálogos

Luego de los hechos violentos en las últimas semanas y el debate sobre el paramilitarismo de la semana pasada en el que surgieron acusaciones de lado y lado, el ambiente para iniciar un nuevo ciclo de conversaciones de paz entre el Gobierno y las Farc en La Habana (Cuba), se siente algo turbio.

Por un lado, sobre la emboscada realizada por las Farc contra una unidad de la Policía Nacional en el municipio de Puerto Libertador (Córdoba), en la que murieron siete agentes, el director de la Institución, general Rodolfo Palomino, aseguró ante los medios de comunicación que el ataque había sido perpetrado por una unidad guerrillera del bloque ‘Iván Ríos’ en alianza con la banda criminal de ‘los Urabeños’.

Esto fue desmentido por la misma guerrilla en un comunicado de prensa publicado en Internet, cuya autoría se atribuye el mando del bloque ‘Iván Ríos’ de las Farc. Allí dice que “nunca hemos tenido alianzas con estructuras del terror estatal como el denominado ‘clan de los Úsugas’”, una parte de la banda criminal de ‘los Urabeños’.

El comunicado de las Farc va más allá, negando cualquier tipo de parentesco entre el comandante de ese bloque guerrillero, Luis Óscar Úsuga Restrepo, alias ‘Isaías Trujillo’, y Darío Antonio Úsuga alias ‘Otoniel’, jefe del grupo criminal de ‘los Úsuga’.

Sobre esto, el mismo Rodrigo Londoño Echeverri, alias ‘Timoleón Jiménez’ o ‘Timochenko’, máximo jefe de las Farc, aseguró que la culpa de que se hagan estas “difamaciones” en contra de la guerrilla recae sobre los “grandes medios de comunicación”.

Según el jefe subversivo, “contrario a lo dicho en los medios, las Farc emboscamos a la caravana policial con fusiles y granadas, sin usar minas sobre la carretera ni dando tiros de gracia a los policías heridos”. Por el contrario, ‘Timochenko’ aseguró que “antes bien, a los heridos enemigos, se les brindó oportuna atención médica”.

En este sentido aseguró que “alcanzar la firma de un acuerdo final de paz en la Mesa de Conversaciones, va a ser una tarea titánica”, a pesar de lo cual el máximo comandante de las Farc aseguró que “trabajaremos incansablemente para conseguirlo”.

UNA ACCIÓN QUE NECESARIO ESCLARECER

Sobre esto opinó el exconsejero presidencial de paz, Carlos Eduardo Jaramillo, quien aseguró que “si bien, estas acciones violentas son normales si se negocia en medio del conflicto, es necesario aclarar bien si son ciertas las afirmaciones del general Palomino, sobre la supuesta alianza de las Farc con las denominadas bandas criminales”.

Para Jaramillo, “sería gravísimo que al momento de desmovilizarse las Farc, luego de la firma de un acuerdo final, haya algunos que se unas a estos criminales para seguir delinquiendo y dedicándose al narcotráfico”.

A pesar de ello, Carlos Jaramillo quien actualmente se desempeña como profesor en varias universidades, afirmó que “estos son temas que no hacen parte de la agenda y no deberían afectar el flujo de las conversaciones de paz que se están dando en La Habana”.

Algo similar opinó el ex Alto Comisionado de Paz, Daniel García Peña, quien también resaltó la importancia de esclarecer estos hechos “pues mientras las Farc nieguen sus vínculos con las bandas criminales, será la palabra del uno contra el otro y eso no es bueno para la confianza en el proceso”.

Para él, “es necesario que el Gobierno muestre pruebas de esta supuesta alianza y que las Farc, por su parte, digan si en verdad están unidas en torno a la paz o si tienen disidentes internos”.

Pese a esto, el excomisionado de paz, consideró que “los diálogos está muy avanzados para interrumpirse en este momento y por eso este tipo de cosas deberían investigarse de forma externa al proceso de paz, sin alterar su curso”.