Dieron de baja a dos negociadores de las Farc

COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ

Las Farc confirmaron ayer que en el golpe asestado por las Fuerzas Militares al grupo guerrillero la semana pasada en Guapi (Cauca), fue abatido Pedro Nel Daza Narváez, alias Jairo Martínez, quien estuvo en La Habana, Cuba, en las negociaciones que adelanta el Gobierno Nacional con la guerrilla.

También se confirmó anoche que Adán de Jesús García, alias Emiro Chaqueto, negociador de las Farc que estuvo en Cuba, murió tras el bombardeo que se llevó el pasado 21 de mayo a cabo en Riosucio, Chocó (ver recuadro).

Jairo Martínez nació el 10 de marzo de 1952 en Pitalito (Huila), al culminar sus estudios escolares, se trasladó a la capital colombiana e ingresó a la Universidad Nacional a estudiar trabajo social.

Fue allí, a finales de los 90, cuando decidió unirse a las filas de las Farc y con el pasar del tiempo y la experiencia adquirida logró convertirse en el cuarto jefe del bloque Sur, la estructura guerrillera más militarista de las Farc.

Fue el responsable, por designación de Manuel Marulanda Vélez, de la seguridad del grupo armado ilegal en toda la zona de distensión durante los diálogos del Caguán que tuvieron lugar en el mandato del expresidente Andrés Pastrana.

El 20 de febrero del 2002 participó en el secuestro del avión de Aires que tenía como destino Neiva y que fue obligado a aterrizar para secuestrar al entonces senador Jorge Eduardo Géchem, entonces presidente de la Comisión de Paz del Senado, lo que significó el fin de las conversaciones de paz del Caguán.

Tuvo bajo custodia a un grupo de secuestrados en el sur del país, además de ser sindicado de haber sido el autor del secuestro del periodista francés Romeo Langlois, quien fue raptado mientras desempeñaba su labor durante un combate guerrillero.

El comandante Jairo también encabezó la liberación de los miembros del Gaula: Wálter José Lozano Guarnizo, Juan Fernando Galicia Uribe y Alexis Torres Zapata y del soldado Giovanny Domínguez, en Guaviare.

Fue además el motor de las marchas de campesinos cocaleros que pusieron en jaque al presidente Ernesto Samper. Quienes lo conocían aseguran que era un tipo fuerte, al que "no le temblaba" la mano para hacer cumplir sus órdenes, pero que a la vez era un gran movilizador de masas.

Fue además quien retuvo por 13 años a Pablo Emilio Moncayo, hijo del recordado profesor Moncayo, quien marchó por diferentes regiones del país pidiendo la liberación de su hijo.

Estaba acusado de desapariciones y ejecuciones de “posibles infiltrados”, la composición a dedo de la Policía Cívica que reemplazó a la Policía Nacional y el funcionamiento de las oficinas de quejas y reclamos (mecanismo para impartir justicia con fusil) durante el despeje en el Caguán.

También se afirma que fue clave en la logística del lanzamiento del Movimiento Bolivariano y del PC4, estructuras políticas clandestinas de las Farc.

El 28 de febrero del 2014 viajó a La Habana junto con alias Fabián Ramírez e hizo parte de la delegación de paz hasta comienzos del 2015, cuando la propia guerrilla lo hizo volver a Colombia, para, según Pastor Alape, socializar entre las bases guerrilleras los avances del mesa de negociación.

Alias Emiro Chaqueto murió en bombardeo en Chocó

Adán de Jesús García, alias Emiro Chaqueto, negociador de las Farc que estuvo en Cuba, murió tras el bombardeo que se llevó el pasado 21 de mayo a cabo en Riosucio, Chocó.

Alias Emiro Chaqueto o Viejorro era, según las autoridades, el cabecilla de la compañía Felipe Torres y el tercero al mando del frente 36 de las Farc, además era el jefe de la comisión de finanzas de ese frente.

El área de injerencia de alias Emiro eran los departamentos de Antioquia y Chocó, quien ingresó a las Farc hace aproximadamente 32 años y tenía órdenes de captura por los delitos de homicidio agravado, terrorismo.

El Comando General de las Fuerzas Militares confirmó que alias Chaqueto era el responsable del manejo de las finanzas producto del narcotráfico y extorsión a los mineros del nordeste de Antioquia.

En ese mismo bombardeo, realizado en el municipio de Riosucio, Chocó, también murió alias Román Ruiz, máximo cabecilla del bloque noroccidental de las Farc e integrante del estado mayor central.

Emiro Chaqueto aparecía en el listado de los 20 más buscados en Antioquia y las autoridades habían ofrecido una recompensa de hasta $2.150 millones por información que ayudara a su captura.

Se agudiza drama de desplazados en Guapi

351 personas integrantes de 88 familias se han desplazado al casco urbano del municipio por los bombardeos, se calcula que al menos otras 400 familias están en alto riesgo en las veredas San Vicente, Santa Clara, Naranjo, Rosario, Yantín y Caimito. En la Casa de la Cultura los niños, las mujeres, los hombres, los ancianos duermen sobre los colchones y comen los alimentos que la Personería y organismos internacionales les han entregado.

Según los censos de los desplazados realizado por la Defensoría del Pueblo, uno de los primeros grupos de personas que llegó a Guapi está compuesto por 33 familias equivalentes a 165 desplazados, entre las cuales hay 27 niños entre los 0 y los 5 años, y otros 57 menores cuyas edades oscilan entre los 6 y los 17 años. A ellos se suman 81 adultos, 13 de los cuales son mayores de 60 años.

Guapi es un municipio de la costa pacífica caucana que se encuentra amenazado principalmente por el Frente 29 de las Farc, así como por bandas criminales que utilizan su cercanía con el Pacífico para el tráfico de drogas.

Según los datos de la Unidad de Víctimas así como de la Personería de Guapi, los constantes enfrentamientos entre estos grupos y la Fuerza Pública son el principal factor causante de desplazamiento.

Algunos golpes al ejército son por errores militares: Santos

En momentos en que el proceso de paz atraviesa momentos difíciles tras un bombardeo a miembros del frente 29 de las Farc, el presidente, Juan Manuel Santos, pidió a las Fuerzas Armadas mantener la ofensiva y no bajar la guardia.

Señaló que golpes que la insurgencia ha dado a las tropas, como el de Cauca, donde 11 militares resultaron muertos en una emboscada, “han sido también producto de errores militares”, por lo que pidió a los uniformados que estén “pilas y a la ofensiva”, no solo de esas estructuras, sino también de las bandas criminales.