Asesinan a dos policías en Dabeiba (Antioquia)

COLPRENSA | LA PATRIA | MEDELLÍN

Dos policías fueron asesinados ayer en Dabeiba (Antioquia) en una emboscada en la que fueron atacados por desconocidos.

Los dos policías, identificados como Neder Pastrana Hernández y Jhon Blanco Soto, realizaban labores de patrulla en una motocicleta en la vía entre Uramita y Revenidero, informó el comandante encargado del Departamento de Policía de la región del Urabá, coronel Carlos Álvarez.

El ataque se produjo a 6 kilómetros de la cabecera municipal cuando fueron emboscados por la espalda y recibieron disparos de fusil que traspasaron los chalecos antibalas, agregó el coronel Álvarez.

En esa zona tienen presencia varios grupos de las Farc, así como el denominado Clan del Golfo, antes conocido como Clan Úsuga, la mayor banda criminal de origen paramilitar del país.

El Gobierno lanzó hace un año la Operación Agamenon para descabezar al Clan del Golfo y dirigida en particular contra su líder Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel.

El viernes esa banda criminal difundió un comunicado en el que aseguran que respetarán las 23 zonas veredales transitorias de normalización y los ocho campamentos donde las Farc entregará las armas, si se llega a firmar el Acuerdo Final entre esta guerrilla y el Gobierno.

Aunque para las autoridades es claro que este grupo narcotraficante no tienen ideales políticos, el Clan del Golfo se escuda detrás de la imagen de Jorge Eliécer Gaitán, caudillo liberal asesinado en 1948, para adoctrinar a sus militantes, como dejan ver en los panfletos que reparten en las zonas donde operan, y en los que se identifican como Autodefensas Gaitanistas de Colombia.

Esta banda criminal es producto del rearme de algunos miembros desmovilizados del bloque Élmer Cárdenas de las Autodefensas Unidas de Colombia, que delinquía en algunos municipios de Chocó, Antioquia y Córdoba.

Hoy, el Clan del Golfo tiene cerca de 2 mil 550 integrantes y opera en 17 de los 32 departamentos de Colombia, donde controlan las rutas del narcotráfico. Son considerados, además, una amenaza latente para el acuerdo de paz que está a punto de firmarse en La Habana.