Los topos de la mina Pajarito

FREDDY ARANGO
LA PATRIA | MANIZALES

Su lugar de trabajo es debajo de la tierra: a 11 metros verticales de la superficie y a 300 en línea recta por un túnel que ellos mismos excavan por debajo del lecho del río Cauca. Allí el calor es infernal, los olores insoportables y el riesgo es compañía segundo a segundo. Agachados y hasta en cuclillas se juegan todos los días la vida detrás del eternamente codiciado oro.

Oscuridad, sacrificio y riesgo es lo que experimentan cerca de mil mineros que se sumergen a diario en las profundidades de 44 minas ubicadas en los sectores del Vaticano, Kilómetro 41 (corregimiento de Manizales) y La Flecha, en la entrada de Marmato. Con el diario producido sobreviven 4 mil ochocientas personas que integran las familias de los topos mineros.

En la mina Pajarito (a medio kilómetro de Irra, hacia Medellín), hombres y mujeres que generación tras generación han ejercido el oficio, descienden por un hueco de tierra vertical colgados de un lazo, hasta 11 metros de profundidad. Al tocar fondo empieza su labor: en cuclillas o gateando, escarban en los vericuetos, en distintas direcciones, según les indica la experiencia.

El diámetro máximo de su espacio de acción es de un metro con 20 centímetros. La temperatura ronda los 28 grados centígrados y en cuanto se avanza por el túnel la oscuridad es más evidente. Una lámpara, bombillo o linterna alumbran el repique de piedra que se arranca de las entrañas terrosas y luego es extraída a la superficie en un balde, que se amarra del mismo lazo con el que han bajado. Es el momento de regresar a veces con las manos llenas o con las manos vacías, o al menos con un gramo de oro, el cual se vende en el mercado por 40 mil pesos, que en ocasiones son repartidos entre ocho de estos topos humanos.

El hueco de la mina lo llaman boca de cúbico. Entrar en él es como descender por un tubo.

Trabajan de 8 a.m. a 3 p.m. con la esperanza de conseguir el sustento diario.
 

En la mina Pajarito laboran 9 mujeres cabezas de hogar y 14 hombres.
 

Los baldes salen llenos de repique de peña, en el cual buscan el metal precioso.

Hace un año cavan en este hueco y el oro encontrado es escaso.

La incomodidad para salir o penetrar en estos tubos subterráneos los convierte en todos unos héroes.

Cifras

Según un estudio que realizaron la Chec y Confamiliares:
- El 20% de los mineros son mujeres.
- El 95% trabaja en condiciones de informalidad.
- El 66% está en tramite de legalización.