Liset Espinoza
LA PATRIA | Manizales
Luz Marina López Largo es madre cabeza de hogar. Desde hace cuatro años vende chontaduro y desde hace un mes instaló su puesto, lo mismo que otros 22 vendedores informales, frente a la Alcaldía para exigirle a la Alcaldía de Manizales que les asignen chaleco para laborar.
Ellos se reúnen todas las mañanas en la Plaza Alfonso López. Allí preparan sus carretas y alistan los productos para salir juntos a las 9:30 a.m. y quedarse hasta las 6:00 de la tarde. Sin embargo, en la mañana de ayer esa rutina se interrumpió. Personal de la Secretaría de Medio Ambiente cercó la plazoleta de la Alcaldía hasta nueva orden.
"Queremos trabajar, pero el señor alcalde nos manda a quitar nuestros productos y no nos los devuelven. Hace poco me quitaron mi puesto y me dejaron cinco meses manicruzada y para que me lo devolvieran me tocó pagar $103 mil. Ellos no ven el esfuerzo que uno hace para recolectar esa plata", dijo Luz Marina.
Otro vendedor, que está a su lado y que no quiso dar su nombre, indicó que también a él le quitaron su puesto y que no lo ha reclamado porque no tiene plata. "Por ahora trabajo con uno prestado. Además, por qué se tiene que pagar por lo que es de uno. ¿ellos qué hacen con esa plata?"
Parados
Ante la medida, algunos andan por las calles para no perder el día, mientras que otros, como el vallecaucano Óscar Eduardo Gaviria, radicado en la ciudad desde hace 10 años, se quedaron en la Alfonso López. Él lleva cuatro años como vendedor de frutas, labor que ve como una alternativa para subsistir, pero tampoco está dentro del programa "Nos hicieron un estudio socioeconómico y me parece que estuvo mal hecho el seguimiento, porque hay personas que no son merecedoras. Reclamamos el derecho de igualdad y al trabajo".
Alba Ruth Vera, otra afectada, también se quedó en el sector, pero expresó que le tocó guardar los mangos que tenía para venta. "Mire, allá en la esquina están parados para no dejarnos pasar".
Ferney Castro comentó que junto con dos compañeros, y con ayuda de la defensora del Pueblo, instauró una tutela ante el juzgado Quinto Civil del Circuito, el cual le ordenó a la Alcaldía hacer un análisis de su condición sociofamiliar y económica y ofrecerles una alternativa de subsistencia.
No obstante, Castro indicó que ningún funcionario de la Administración se ha dirigido a sus residencias.
Él, como lo publicó LA PATRIA el pasado 12 de septiembre, con otros vendedores se encadenaron con sus puestos a la pila de agua de la Plazoleta de la Alcaldía y se declararon en huelga de hambre por tres días.
Sin formalizar
El miércoles tuvieron una reunión con Carlos Arturo Agudelo, secretario General de la Alcaldía, quien informó que los escuchó, pero que el futuro de ellos depende de la Secretaría de Medio Ambiente, a cargo de Juan Carlos Barrera.
Este explicó que actualmente hay 77 vendedores que se formalizan y que capacitan en mercadeo, servicio al cliente, emprendimiento, manipulación de alimentos y cultura del ahorro.
"Ocho meses duraron los censos para identificar a esos seleccionados. Los 23 vendedores que ocupaban la plazoleta de la Alcaldía no fueron registrados porque realizaban en la galería otras actividades laborales o no estaban en la ciudad; por consiguiente no se formalizarán y se adelantará procedimiento de aprehensión e incautación".
Con respecto a la tutela el secretario expresó que los chalecos con para los vendedores de perecederos mas no para los de tinto. "En ningún momento les estamos impidiendo que dejen de vender. Cuando se hizo el censo ellos no estaban en el Centro Histórico y por eso no salieron beneficiados. Igual miraremos la tutela".
Con los vendedores
Miguel Caicedo, vendedor desde hace 40 años.
La situación que tenemos ahora no la merecemos porque todos necesitamos trabajo. Hay 77 vendedores con chaleco.
Alba Ruth Vera, vendedora desde hace 34 años.
Nos quedamos todo el día para que el alcalde vea que queremos llegar a un arreglo porque nos sentimos discriminados. En la reunión con el secretario nos dijeron que nosotros les estorbábamos a los peatones y a los carros y entonces ¿los que tienen chaleco no estorban?
El programa
En el Centro está tu corazón, es responsabilidad de todos. Proyecto de recuperación ambiental del Centro de Manizales es el mensaje que se lee en los chalecos azules que portan los vendedores informales autorizados para trabajar en el espacio público. 37 de ellos se graduaron el martes en servicio al cliente y emprendimiento. Las capacitaciones duraron tres meses y las realizó la Universidad de Manizales. Su formación continuará el año entrante.
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