Un vendaval asustó el sábado en la vereda Bajo Tablazo de Manizales

MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES

La lluvias que anhelaban decenas de personas para mitigar el intenso calor que se ha sentido en Manizales desde el pasado 8 de julio, y que cayeron el pasado sábado en la tarde, no dejaron tan satisfechos a algunos pobladores.

El cielo, en la ciudad, empezó a tomar tonos grises hacia el mediodía y la temperatura descendió a unos 17 grados, comparado con los días soleados y los hasta 30 grados centígrados registrados semanas atrás. Todo anunciaba que la lluvia llegaría en cualquier momento.

A las 11:50 de la mañana en algunos sectores de la ciudad empezó a llover, pero según indicaron pobladores de la vereda Bajo Tablazo hacia la 1:40 de la tarde comenzó un fuerte aguacero, que duró una media hora. Lo que más los atemorizó es que por unos 10 minutos ocurrió un viento tan fuerte que arrancó tejas, rompió vidrios e inundó viviendas e instituciones.

José Rodrigo Salgado, que lleva 20 años viviendo en Bajo Tablazo, dijo que la tempestad fue muy fuerte y que además nadie se esperaba que en medio de tanto sol ocurrieran estos fenómenos naturales.

Reportes

El saldo, según el mayor Carlos Alberto Marín, comandante del Cuerpo Oficial de Bomberos de Manizales, fue la afectación de techos en la Institución Educativa Rural María Goretti y de dos viviendas. Además, que en la vereda San Peregrino, vía a La Manuela, cayeron dos árboles y se afectó un cultivo de plátano debido a los fuertes vientos.

Sin embargo, la comunidad de Bajo Tablazo reportó otros daños. José Rodrigo mostró que en la Parroquia La Sagrada Familia, enseguida de la Institución Educativa, se dañaron varias tejas y se rompieron vidrios. El templo se llenó de agua y la casa cural también resultó afectada. Ayer estaban cambiando tejas.

Gloria Cristina Hernández, que vive a la entrada de la vereda El Aventino, antes de llegar al Bajo Tablazo, también indicó que unas cinco casas resultaron afectadas. "Se nos mojaron pertenencias y colchones. Ese vendaval fue impresionante, pero la más perjudicada fue mi vivienda".

Hombre lesionado

Entre los damnificados está la familia de Luz Dary González, que reside en una vivienda frente a la iglesia y el plantel  educativo. El vendaval les destechó buena parte del predio, ubicado en un segundo piso de la construcción, y les inundó las habitaciones. "Eso fue tan miedoso que pensé que la casa se iba a ir".

Cuando Luz Dary estaba dando esta declaración y se dirigía a conseguir seis tejas, cinco canales y una claraboya, entre otros elementos para reparar la casa, se sintió un estruendo y luego unos quejidos de un hombre. Se trataba de su esposo, quien se encontraba subido en el techo mojado, se resbaló y fue a dar dentro de la residencia. Cayó unos tres metros y medio y quedó tendido en el piso, en medio de pedazos de tejas rotas y de vidrios.

El hombre se quejaba, pero no quiso que alguien llamara a una ambulancia. Minutos después se paró sobándose la parte trasera de la cabeza y la espalda, donde recibió los golpes. Por más que Luz Dary y vecinos le dijeron que no se volviera a subir, por lo peligroso del tejado, él lo hizo de nuevo. Según indicaron ayer en la comunidad, el hombre tuvo  que ser llevado a un centro asistencial por dolencias posteriores.

Más inundados
 

Mientras esto ocurría, en el plantel recogían tejas que les trajo el viento de alguna parte, intentaban sacar el agua de los salones y barrían vidrios y maderas que cayeron. Los espacios más afectados fueron las salas de profesores y la de cómputo.

La institución estaba ocupada ese día con el programa de educación para adultos, que atiende a 382 estudiantes. Algunos fueron enviados para sus viviendas, pero otros continuaron en sus clases, a pesar del agua.
La rectora del María Goretti, Aidé Moncada Pineda, manifestó que tendrían que cotizar los daños para iniciar la reparación.

Los intensos días soleados de semanas anteriores se vieron opacados por esta emergencia, a la que acudió Bomberos para evaluar la situación.

Explicación técnica

Óscar Eduardo Toro, jefe de la Unidad de Gestión del Riesgo (UGR) en Manizales, explicó que agosto es un mes caracterizado por la presencia de vientos, y que en medio del fenómeno de El Niño, como el que está viviendo el país, se pueden presentar súbitamente, por lo que advirtió que en el municipio se repetirán estos incidentes.

Sobre las lluvias registradas entre el viernes en la noche y el sábado, el jefe de la UGR manifestó que le dieron oxígeno a los cultivos de la zona rural, pues los registros de lluvias en los últimos 25 días estaban muy bajos.
Según la Red de Estaciones Hidrometeorológicas de Manizales, hasta el pasado jueves el acumulado de los últimos 25 días en las 16 estaciones era de 4,2 milímetros, y el sábado subió a 13,5 mm. La intensidad de lo que será este Niño se puede ver al comparar estos datos con el acumulado que reportó la Red el 1 de julio de este año, de 47,9 mm.

Aguas de Manizales informó que en las cuencas no llovía desde el 8 de julio, completando el pasado viernes 24 días completamente secos, pero en la noche se empezaron a registrar algunas lloviznas.

La Red de Estaciones, a través del ingeniero Alexánder Pachón Gómez, señaló ese viernes, que en la estación La Palma por primera vez se llegaba a un acumulado de 0 mm en 25 días, frente a registros que llevan desde noviembre del 2006. Además, que en Manizales se tuvo el julio más seco desde que se registran datos en esta Red Manizales; sin embargo, aclara que faltaría analizar datos de otras entidades como Cenicafé e Ideam.

El jefe de la UGR agregó que según pronósticos del Ideam, se mantendrá el clima seco, propio del Fenómeno de El Niño, pero acompañado de lloviznas aisladas y de vientos súbitos.

Recomendaciones
 

* Asegurar tejas, cubiertas y estructuras que soportan los techos de las casas.
* No subirse a reparar daños con las tejas húmedas ni mojadas, son como jabón.
* Reportar a las autoridades, línea 116 de Bomberos, cualquier situación irregular.
* Aunque haya llovido un poco este fin de semana, el llamado es a usar racionalmente el agua, pues está previsto que el Fenómeno de El Niño se extienda hasta el primer trimestre del 2015, es decir hasta marzo, con días muy secos.