Exigieron respeto al trabajo y la educación

Universitarios y empleados judiciales iniciaron ayer, juntos, la marcha para exigir al Gobierno Nacional respeto y garantías. No obstante, algunos estudiantes venían haciendo grafitos y explotaron papas bombas, por lo que los otros manifestantes detuvieron el paso para imponer el orden.
"Eso le quita respeto y seriedad a nuestra posición y exigencia", fue el comentario de varios empleados judiciales, que llevan dos semanas en paro exigiendo la nivelación salarial.
El sector educativo, por su parte, está en desacuerdo con la reforma tributaria, en la que modifican los aportes parafiscales. Estos, que las empresas giran, sirven para el sostenimiento del ICBF y del Sena. La propuesta busca que este rubro dependa de las utilidades de las empresas.
William Franco Arbeláez, presidente del sindicato del Sena, explicó que así se pone en riesgo al Sena. "Sabemos que las empresas no van a reportar lo que ganan realmente, y además, de esta forma, los parafiscales estarán sujetos a la demanda del mercado".
Wilson García, presidente de Educal, agregó que rechazan "la reducción presupuestal en un 50% para el sistema de salud del magisterio". También exigen que se desmonte la jornada extendida por el respeto al tiempo libre de los docentes y porque está funcionando sin recursos, aseguró García.

Cálculos para el Sena

William Arbeláez, presidente del sindicato del Sena, afirma que la entidad recibe $2 billones 215 mil millones, y las cuentas que hacen es que si se aplica la reforma tributaria no quedarían ni $650 mil millones. En la seccional Caldas trabajan 186 empleados de planta y 500 contratistas, para unos 5 mil estudiantes.