En el colegio Santa Teresita de Chinchiná desarrollan lógica y motricidad con el Rubik

Estudiante cuenta su experiencia con el cubo. Asegura que mejoró su pensamiento lógico, capacidad de razonamiento y agilidad.

Aprender a armar el cubo Rubik me demoró menos de un día. Dominarlo, una semana o dos. A mi parecer tuve un aprendizaje rápido a diferencia de algunos de mis compañeros, a quienes se les dificultó más.

El poder armarlo mejoró mi pensamiento lógico, capacidad de razonamiento y agilidad en las manos para ciertos movimientos, creo que con este aprendizaje cada persona puede mejorar distintos aspectos motrices o mentales.

En un principio me tardaba cuatro minutos para poder resolverlo, ahora lo hago en menos en menos de un minuto treinta segundos. Me he arriesgado, entonces, a armar otro tipo de cubos y opino que mis resultados son buenos. Me creo capaz de resolver cualquier rompecabezas.

Cualquier persona puede aprender, ya solo se necesita un poco de paciencia y dedicación.