Albergue Azul, donde la naturaleza reina

VALERIA VILLEGAS
LA PATRIA | MANIZALES

Disfrutar de los colores de las flores, el sonido vibrante de las aves y las delicias de los alimentos sanos son las sensaciones que se encuentran en la granja familiar Albergue Azul, un lugar agroecológico y biodiverso ubicado en la vereda Alto del Naranjo, en la antigua vía Manizales -Chinchiná.

En Manizales existe gran diversidad ambiental, que necesita ser conservada y protegida para evitar que desaparezcan. Esta es una actividad de Cecilia Rivas, la creadora de la granja y gestora del proyecto de vida “estamos conservando especies y semillas que están extintas como  el trigo amazónico, Sagú, Yacón, papa aérea y Mafafa, entre otras y tratamos de producir nuestras propias semillas para poder tener una continuidad y soberanía alimentaria”.

Más detalles
La producción de la granja es netamente orgánica, pues los alimentos se cultivan sin la utilización de químicos y esto hace que lo que se consuma sea sano y saludable, principalmente para sostener a los integrantes de la familia y a los visitantes que llegan al lugar.

“Si viviera acá sola sería capaz de vivir con lo que tengo, porque hay suficiente cantidad de proteína, vitaminas y aminoácidos, que es lo que yo necesito para mi alimentación y para tener una buena salud” comenta Cecilia.

Aves, flora y casa azul
Los enormes árboles que cubren parte de la granja le proporcionan sustento y hogar a más de 90 aves que habitan en la zona. “Lo más gratificante ha sido la respuesta que he tenido de la comunidad y también de las mismas especies. La población de aves ha aumentado en estos 10 años que he venido trabajando”.

También adorna el paisaje una casa azul, con artesanías donde la misma naturaleza produce sus materiales y las cuales se utilizan para hacer accesorios y venderlos al público.
Flores de muchas especies que están en los senderos de la propiedad mostrando su infinita belleza y varios animales que sirven para el consumo, proporcionan productos y sirven en la producción de técnicas de fertilización con su estiércol.

Una experiencia voluntaria

El Albergue Azul está inscrito en una red mundial de voluntariados en granjas orgánicas (www.wwoof.org) y recibe de a dos personas, por un período mínimo de 3 semanas.

Las personas que llegan reciben alojamiento a cambio de contribuir en las labores de la granja. "Este voluntariado es muy interesante porque es borrar fronteras, es tener un intercambio cultural, estos chicos vienen y ellos me enseñan lo que saben y aquí vienen a aprender de todo lo que es la agricultura orgánica en el trópico y las actividades que nosotros realizamos aquí”, agrega Rivas.

La experiencia trasciende en el sentido de que se conoce sobre un espacio innovador, que permite fomentar el aprovechamiento de todos los recursos que existen en la naturaleza y proteger la diversidad.

LO DESTACABLE
El Albergue Azul es una granja de 1.7 hectáreas. Allí se puede apreciar la magnitud de llevar una vida sostenible, llena de naturaleza, armonía con el ser vivo y lo más importante despertar conciencia de que el mundo tiene lo que necesitamos, pero debemos protegerlo y conservarlo para beneficiarnos mutuamente.

Recuadro
El Albergue Azul propone un recorrido ecológico a través de la finca. Los visitantes aprenderán métodos ecológicos de cultivo, potencial de las plantas, aprovechamiento de las aguas lluvias, el reciclaje de materiales orgánicos y cómo funcionan los sanitarios secos.

Para conocer más información de este lugar ecoturístico y biodiverso ingrese a albergueazul.weebly.com/