12 años repartiendo goticas de amor

RICHARD AGUIRRE

LA PATRIA | MANIZALES

Lo que se aprende de los abuelos y de las madres nunca se olvida. Eso le pasa a Ximena Botero, manizaleña que vive en Miami (Estados Unidos) desde hace 15 años, y que desde hace 12 sigue haciendo realidad los deseos de su madre: regalar sonrisas en cada Navidad.

"Este fue el legado que mi mamá me dejó. Cuando tenía 13 años ella falleció, pero nos inculcó que lo mejor de la vida era darles amor a las personas que lo necesitan", suspiró Ximena, quien con con una sonrisa gigante y el micrófono en la mano seguía dando los números de las boletas para que los niño del barrio Solferino, se acercaran a reclamar su juguete.

Ella y su fundación Goticas de amor son cumplidos con la cita navideña para entregar un poco de alegría en esta temporada. "Yo vengo dos o tres veces al año, pero sagradamente en diciembre no puedo faltar en la ciudad", resaltó.

Su hermana, Juliana, es la fiel escudera en esta tarea. "Queremos llenar de alegría los corazones de los niños y abuelos más vulnerables de esta región", explicó Ximena.

Luego de tres días de correrías en ancianatos y barrios vulnerables de Manizales y de entregar alrededor de 300 regalos, entre zapatos, cobijas y pañales para los abuelitos, y juguetes para los niños, cumplió con el legado familiar. "Soy una supermamá, que con mis tres hijas y mi familia preparamos esta actividad que Dios nos puso en el camino", apuntó.

Papá Noel viajó desde Miami para aterrizar con su trineo en el Solferino de Manizales.