JOSÉ LUIS PANIAGUA
EFE | LA PATRIA | KATMANDÚ
Katmandú despide a sus muertos en el terremoto del sábado mientras cientos de miles de personas se marchan de la devastada capital, adonde llegan, sin embargo, nepalíes de todo el país y aquellos que viven en el exterior y quieren saber qué sucedió con sus familiares.
En el Aarya Ghat, un lugar santo bajo el cobijo del agrietado templo al dios hindú Shiva de la capital, las piras funerarias no se detienen como tampoco lo hacen los llantos y el dolor por la pérdida de familiares.
"Hay que resignarse, no queda otra solución", dijo Sagar Dahal, un joven profesor, tras despedir a su tía y tres de sus primos.
El número de muertos por el sismo superó los 5.000 y el de heridos alcanzó los 11.000, aunque Katmandú comienza a prepararse para conocer lo que sucedió en el resto de Nepal a medida que se van recuperando las comunicaciones por carretera.
También reconoció que todavía no puede cuantificar la magnitud de la catástrofe ni el número de muertos por la falta de acceso a pueblos remotos, aunque comienzan a salir datos como el de 450.000 desplazados y casi 95.000 infraestructuras dañadas.
"No somos capaces de evaluar la situación ya que pueblos enteros han resultado dañados en zonas remotas. No sabemos cuánta gente había en los pueblos cuando se produjo el sismo", declaró Laxmi Prasad Dhakal, portavoz del Ministerio del Interior nepalí.
Los hospitales de Katmandú se encuentran al límite de su capacidad mientras continúan llegando heridos desde otros distritos del país.
Mientras desde las aldeas los damnificados acuden como pueden a la principal ciudad del país, alrededor de 340.000 personas han abandonado el valle de Katmandú por miedo a nuevas réplicas y a brotes de enfermedades, según la Policía de la capital.
El Centro Nacional de Operación de Emergencia de Nepal eleva a esta cifra a unas 420.000, mientras se ven salir de la ciudad innumerables autobuses, camiones y otros vehículos con gente incluso subida a los techos o agarrada como puede a las puertas y ventanas después de subir a la carrera.
El Gobierno nepalí necesita cerca de medio millón de tiendas de campaña y apenas 4.700 ya han sido distribuidas.
El terremoto no sólo costó miles de vidas, sino también parte de la herencia cultural de Nepal, al dañar la práctica totalidad de los lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Los templos y monumentos históricos derrumbados o en ruinas en la emblemática plaza Bashantapur Durbar de la capital reflejan el desastre.
Destacado
La ONU calcula que se requieren 415 millones de dólares en los próximos tres meses para la ayuda más urgente a los damnificados, que incluye alojamiento temporal, agua, alimentos y atención médica.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015