Tiples, guitarras y bandolas hacen la diferencia

LISET ESPINOZA

LA PATRIA | MANIZALES

Los sonidos de las bandolas, los tiples y las guitarras reemplazaron a los violines, las violas y los violonchelos, de la orquesta clásica, para conformar la Orquesta Típico Filarmónica de Caldas, en la que también hay contrabajo, tuba, cornos, flautas, clarinetes, oboe y percusión sinfónica.

La agrupación la integran 64 músicos de diferentes municipios del departamento. Esta es una apuesta de la Secretaría de Caldas para llevar al público los sonidos de las cuerdas pulsadas, más cercanos al oído y la identidad de los caldenses que los de cuerda frotada.

"Queríamos algo que le diera ese color y sonoridad de orquesta sinfónica. Se llama filarmónica, pero aún está en formación. Convocamos a niños y jóvenes de las escuelas municipales de Caldas. La integran músicos de Pácora, Aguadas, Manzanares, La Dorada y Viterbo, entre otros", dijo Paulo Andrés Olarte, formador de formadores en el componente de músicas tradicionales y cuerdas pulsadas.

Inicio

La iniciativa de una orquesta típica surgió en en 1974 con la dirección del maestro Marco Tulio Arango, en la Normal de Señoritas, pero no se concretó. Según Paulo Andrés, "él empezó con la idea de formar un grupo que tuviera una conformación o una organología de instrumentos típicos, pero que también tuviera instrumentos sinfónicos como el violín".

La Secretaría de Cultura de Caldas retomó la idea y Paulo Andrés la llevó a cabo al ver que en otros lugares, como Risaralda, había un fuerte procesos de cuerdas pulsadas que no había en Caldas.

"La orquesta nace como una iniciativa de seguimiento a los procesos de formación. No es un espectáculo en sí, no le estamos apostando a que la gente vaya a ver conciertos, sino a que observe el desarrollo de formación de los jóvenes, que trabajan con la música durante el año y quieren que los inviten a tocar", puntualizó.

Muestra

En una primera etapa las escuelas no estaban consolidadas por la falta de docentes en algunas de ellas. En la segunda fase la Secretaría de Cultura de Caldas trabajó el proyecto con escuelas constituidas, y a Paulo Andrés le pareció importante hacer una muestra con los artistas aprovechando el Festival de Música Andina Colombiana El pequeño Kumanday, para presentar la agrupación en el auditorio de la Universidad Nacional.

"Tomé la vocería del proceso y convoqué al director de la Orquesta de Cuerdas Pulsadas de Risaralda para que nos acompañara en el recital. La intención era hacer un gran concierto que comenzara a hacer ruido, tanto en las músicas tradicionales como en el departamento. Hicimos la convocatoria, mandamos los arreglos a todos los niños y a los profesores para que los montaran", agregó.

El concierto, que se ofreció el 15 de noviembre, tuvo un costo de $15 millones, recursos aportados a través de la Corporación Rafael Pombo.

Diferenciador

En este nuevo proyecto también tuvieron en cuenta la música urbana. Según Álex Olarte, formador de formadores en apoyo a las escuelas municipales en lo referente a las cuerdas pulsadas y músicas urbanas, indicó que pretenden ser incluyentes porque los procesos de músicas urbanas se sienten aislados y desamparados de lo que pasa dentro de las administraciones.

"Queremos darles un poco de participación, acompañarlos dándoles apoyo técnico haciendo un concierto con más impacto visual y atractivo", dijo.

Añadió que buscan visualizar los procesos que ocurren en las escuelas para que la gente se entere por medio de estos formatos de lo que sucede en los municipios, alrededor de las cuerdas pulsadas.

El próximo año se formalizará el proceso para hacerle seguimiento y aspiran presentarse en el Teatro Los Fundadores, para ofrecer una experiencia sensorial diferente.

Resguardo indígena

Durante el concierto, la Secretaría de Cultura de Caldas también acompañó el proceso de la chirimía del Resguardo Nuestra Señora Candelaria de la Montaña, sector las Tres Cruces de Riosucio, para darle participación a la música propia y local. "Es el único resguardo que trabaja este tipo de música y pocos departamentos tienen la posibilidad de tener músicas indígenas. Entonces la idea era formar un collage de músicos, formarlos en ese formato en el que había no solo pasillos y bambucos, sino rock", dijo Paulo Andrés Olarte.

Pionera

En este momento la pionera en Colombia es la Orquesta de Cuerdas Pulsadas de Risaralda, la cual lleva cuatro años de trabajo.