Navidad chatarra en los patios de la zona industrial

Freddy Arango

LA PATRIA | MANIZALES

Para fin de año es tradicional ver las figuras, arreglos y montajes de los alumbrados navideños, pero se han preguntado ¿qué pasa con esas figuras y adornos cuando cumplen su ciclo de vida útil?, ¿a dónde van a parar?, ¿dónde los guardan?, ¿se convierten en material de reciclaje? o ¿se desechan como chatarra?

Estas preguntas las responde el conductor de carga pesada Antonio Herrera, quien lleva 15 años como mulero y este año de pandemia está contratado para transportar una carga pintoresca y llamativa.

Subió a su tractomula figuras navideñas como burras, camellos, triciclos gigantes, pastores, gansos, ángeles, estrellas, abanicos y hasta el mismo Papá Noel. Estas terminaron en los patios de Ternium en la zona industrial para ser chatarra y luego fundirse.

Antonio Herrera hizo 10 viajes de arreglos y figuras navideñas para ser reciclados durante 8 días.

Viajes

“En el parque industrial Juanchito en las bodegas de la Chec recogí 10 viajes en la tractomula, cada uno con un peso aproximado de seis toneladas de figuras viejas de Navidad, que ya cumplieron su ciclo en los alumbrados, que ya pasaron de moda y es basura. Eso es puro hierro”, dice Antonio.

Transitar por la vía que conduce a la vereda Gallinazo, que pasa por La Enea, es ver los arrumes de material reciclado, pero ahora tienen su toque navideño. Allí llegaron estas figuras para ser trituradas, reutilizadas y transformadas en varillas de acero, que luego harán parte de alguna construcción en cualquier parte del mundo.

Abanicos, muñecos, estrellas, mulas esperaron en el parqueadero de camiones para ingresar a su destino final en las montañas de chatarras y ser triturados.

Este triciclo, después de recordarle a mucha gente los juegos tradicionales y su infancia, ahora yace en medio de alambres y latas retorcidas esperando la hora de su fin.

Este ángel cargando un ganso y que en algún momento de la temporada navideña fue asediado para posar a lado de muchas familias, ahora espera su turno para ser tragado por la máquina que lo convertirá en polvo y luego varillas de acero.

Papá Noel no es un adorno en medio de la montaña de chatarra, también hace parte de ella.