Cabalgaron por los caminos de herradura entre Marulanda y Pensilvania

RUBÉN DARÍO LÓPEZ

LA PATRIA | PENSILVANIA

A lomo de mula 208 caballistas disfrutaron durante seis horas de una cabalgata entre Marulanda y Pensilvania por las trochas que desde hace 150 años unen a estos dos municipios. La idea de volver por los caminos de herradura por donde avanzaron los colonizadores se convierte en un atractivo turístico para explotar en el oriente de Caldas.

“Somos pueblos hermanos y vecinos por lo que la cabalgata es una oportunidad para fomentar la excelente relación que tenemos. Además, durante el recorrido se ven paisajes inigualables, montañas hermosas y riachuelos cristalinos que nos llenan de alegría” afirmó Nicolás de Jesús Giraldo, alcalde de Marulanda, a su arribo el sábado a la finca El Edén. Allí, fue el punto de encuentro de los caballistas, que disfrutaron de un almuerzo campestre brindado por los organizadores.

Posteriormente hicieron su entrada triunfante a Pensilvania encabezados por carabineros de la Policía Nacional montados en altos caballos en medio de un desfile de carros y motos, para ser recibidos. La comunidad, apostada en los andenes y en el parque de Bolívar, los recibió en medio de aplausos y vivas.

En la plazoleta del parque, la banda sinfónica estudiantil interpretó los himnos de ambas localidades como parte del acto protocolario encabezado por el alcalde de Pensilvania, Jesús Iván Ospina, organizadores y autoridades locales.

Participantes y espectadores recordaron con entusiasmo la memoria de Conrado Quintero, fallecido notario de Marulanda, quien hace cinco años impulsó estos recorridos por los caminos de herradura entre municipios y veredas del oriente de Caldas.

Caballistas

Elías Botero, campesino

Por estos caminos la cabalgata se ve muy bonita, pero me parece más importante el comportamiento de los anfitriones tanto en Marulanda como en Pensilvania, porque nos tratan muy bien. Estos recorridos hay que repetirlos, ojalá dos veces al año.

Sara Ligia Mazo, comerciante

Esto es integración de los pueblos, y ya lo hemos hecho en San Félix, Manzanares, Marulanda, y Pensilvania, donde la gente es maravillosa. La cabalgata es una buena oportunidad para compartir y fomentar nuestra hermandad.

Fernando Eugenio López, médico

Es una cabalgata muy bien organizada tanto en Marulanda como en Pensilvania y este recibimiento tan maravilloso, demuestra la fraternidad que nos une ancestralmente.

Octavio Llano, comerciante

A caballo estamos recuperando la hermosura de los pueblos, por el camino recordamos a nuestros antepasados y queremos dejarle este legado a los jóvenes.

Jaime Alonso Ramírez, notario de Villamaría

El caballo y el hombre van de la mano. El hombre y el caballo trazaron caminos de amistad y de desarrollo. Hoy hemos unido a estos hermosos municipios al recorrer de nuevo la trocha de nuestros abuelos.

José Edgar Chica, médico

Pensilvania es solidario y fraternal, así mismo los recibiremos cuando vayan a Marulanda. Hace 35 o 40 años no transitaba este camino; los recuerdos son hermosos.

William Montoya, integrante de la colonia de Cali

Muy feliz con esta invitación, porque la cabalgata demuestra nuestra capacidad de trabajar unidos y en cordialidad. De verdad es inolvidable este recibimiento que trae a la memoria nuestro origen común como descendientes de la colonización antioqueña.

José Reinel Buitrago, veterinario

Es muy importante por la integración y la memoria de nuestros fundadores, porque a estas tierras el desarrollo llegó a lomo de mula.