“Por problemas pendejos de celos entre mi mamá y mi padre pagué yo, perdiendo el privilegio de poder crecer con el apoyo de mi papá. Hace más de 40 años no sé nada de él y quiero que alguien me lo ayude a encontrar”, pronunció con voz entrecortada y desde una cama de un hospital de Nueva york (Estados Unidos), Miguel Vargas, un hombre que aunque está a miles de kilómetros de su país natal, sueña con volver a abrazar a su papá Miguel Ángel Vargas Gómez, a quien vio por última vez cuando apenas era un niño de 3 años.
Miguel padece de un cuadro crítico de diabetes, que el viernes pasado lo tenía interno en un centro asistencial a la espera de que le dieran salida en horas de la tarde, para ir a la casa donde hace varias décadas vive con su madre, Luz Ena Paz Castillo, quien también padece esta complicada enfermedad.
Desde el hospital, Miguel estableció comunicación telefónica con Q'HUBO para pedir públicamente que alguien le ayude a dar con el paradero de su papá. El último recuerdo que tiene de él es una vez que lo tuvo cargado en sus brazos cuando apenas era un pequeño indefenso . De él sólo sabe que actualmente vive en una de las ciudades del eje cafetero, donde es propietario de varias panaderías.
Miguel hijo, asegura que el rastro de su padre lo perdió porque su mamá un día descubrió que Miguel Ángel tenía otra familia, lo que hizo que la mujer se le desapareciera del mapa y cambiara constantemente de vivienda sin dejar rastro.
Miguel nació y creció en Cali (Valle del Cauca), allí se desempeñó como profesor y trabajó en programas con habitantes de la calle. Su ilusión de buscar un mejor futuro lo llevó a viajar hasta Estados Unidos, a donde años después también se llevó a su madre.
Actualmente Miguel Alberto y Luz Ena están registrados como ciudadanos norteamericanos, lo que les permitiría viajar a Colombia y regresar a Estados Unidos sin ninguna complicación, pero no lo han podido hacer por problemas de salud.
Miguel se desempeña como transportador de carga para empresas que envían encomiendas hacia Colombia. En este trabajo conoció a doña Copelia, una mujer que vive en Villamaría (Caldas), que se convirtió en su ángel de la guarda, ya que ha gestionado por varios medios cómo ayudarle a Miguel, aunque todavía no ha obtenido resultados positivos.
Miguel teme que Dios se acuerde de él en poco tiempo, pues es consciente de que con la enfermedad que padece puede sufrir una complicación en cualquier momento. “No lo estoy buscando para que me ayude económicamente ni a mí ni a mi mamá. Lo que quiero es encontrarlo por una satisfacción fraternal, estar de nuevo y volver a conocer a quien me dio la vida.”
Ahora Miguel espera que su teléfono celular timbre desde Colombia para que le den la tan anhelada noticia.
Miguel Alberto se ha comunicado también con el programa Muy buenos días que conduce el presentador Jota Mario Valencia, en esa oportunidad le dieron un espacio de dos minutos para pedir públicamente que le ayudaran a encontrar a su padre.
Miguel Alberto asegura que su papá tiene unos 3 o 4 hijos más.
Si usted conoce alguna noticia que pueda ayudar a dar con el paradero de Miguel Ángel Vargas Gómez puede comunicarse a los teléfonos 872 08 06 en Villamaría (Caldas) o 334 52 55 en Cali.
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