Lo que les duele a dos escuelas en Salamina (Caldas)

Luis Fernando Rodríguez

LA PATRIA | Salamina

La espera sigue para 22 estudiantes y sus familiares en área rural de Salamina. A los niños, como ha publicado este diario, los pasaron de la sede de Curibital, por funcionar en supuesta zona de terreno inestable, a la escuela Sucre, construida en 1976 y en deterioro.

Por eso, la Jefatura de Gestión del Riesgo de Caldas visitó los dos planteles. Lo clave es que sugirió un estudio geotécnico urgente para dos cosas. Una: de terminar el tipo de trabajos que requiere una parte aledaña a la cancha del establecimiento en Curibital, afectada por un derrumbe. Y la otra: con base en el mismo estudio definir si los alumnos pueden volver a esa sede, que aparentemente no tiene afectación.

Parcial

La Secretaría de Educación departamental ordenó el cierre temporal el 6 de abril, luego de la solicitud de la rectora, Blanca Nidia Patiño, autorizada por el consejo directivo de la Institución Educativa Luis Felipe Gutiérrez, a la cual pertenece la escuela.

El coordinador de Educación de Salamina, Andrés Tamayo, manifestó: “se proyecta venir con una comisión de Planeación de la Administración Municipal de Salamina para establecer el posible estudio Geotécnico y su monto económico, para gestionarlo”.

La rectora pidió el concepto sobre el riesgo del predio frente al movimiento de masa y una roca en la pendiente lindante con el centro educativo. El 24 de abril Luz Enith Sepúlveda, de Curibital, comentó que ella no mandaría a sus hijas a El Cedrito. "La carretera está en pésimas condiciones, la escuela deteriorada y el transporte por aquí es muy duro para los niños”. La espera para ella, los otros padres y los niños continúa.

Recomendaciones

La Jefatura Departamental de Gestión del Riesgo visitó las dos escuelas y recomendó lo siguiente:

En Curibital

Se requiere con urgencia la realización de un estudio geotécnico del movimiento de masa aledaño a la sede educativa de Curibital, que afectó la cancha. La idea es determinar la obra de ingeniería para mitigar el riesgo y volver a habilitar el escenario deportivo. Además, mostrará la realidad del riesgo de la estructura de la escuela para determinar si se puede utilizar o no como centro educativo, debido a que aparentemente no tiene afectación.

Se debe enterrar o reducir a fragmentos el bloque de roca para eliminar el peligro que se tiene en caso de producirse un movimiento del mismo.

Se debe replantear el trazado de forma técnica de la canaleta en tierra, y construirla en cemento bajo especificaciones idóneas.

En El Cedrito

Se debe realizar un estudio de patología y geotécnico a la estructura para mitigar el daño que se está presentando a la edificación en este momento y que dé como resultado las obras de ingeniería necesarias para proteger la escuela.

El pozo séptico requiere mantenimiento en el menor tiempo posible con el propósito de determinar su estado y prevenir accidentes, para mirar la conveniencia de su uso a la escuela.

Se debe hacer mantenimiento en la batería sanitaria de tipo estructural y de sistema de acueducto y alcantarillado para subsanar los daños. Las averías estructurales y de tuberías de acueducto y sanitarias pueden ser por el asentamiento que se observa.

El cielorraso debe repararse o por su defecto retirarse con el fin de evitar algún accidente físico a los alumnos.

Por el transporte

Es necesario un análisis de movilidad de la ruta que se dirige a la escuela El Cedrito, debido al mal estado de la vía. A comunidad de Curibital le preocupa que en el momento solo hay un yip, con un solo turno para 22 estudiantes, hasta la sede El Cedrito. También manifestaron su preocupación por la seguridad para sus hijos pequeños y adolescentes, si se tienen que desplazar hasta allí a pie. Por esto solicitaron a las autoridades, dos carros para que transporten a sus hijos hasta la nueva sede.

Tamayo Villegas respondió, que para cubrir esta ruta no hay oferta de conductores y que el costo diario de un solo yip, es de $ 130 mil. “Si yo vengo a decirles aquí que vamos a habilitar otra ruta, sería una mentira. Porque el presupuesto no lo permite y está proyectado a 74 días. Hay que entender que los recursos económicos para transporte escolar en el primer semestre son de la Administración Municipal y en el segundo semestre de la Gobernación de Caldas”, concluyó.