ANDRÉS RODELO
LA PATRIA | MANIZALES
Hay división en las discusiones sobre la reforma del Estatuto General de la U. de Caldas. Este año se han realizado varias deliberaciones para renovar este mapa de ruta del centro educativo, que contiene sus componentes académicos y administrativos. Para tenerlo claro: si la Universidad fuese Colombia, el Estatuto vendría siendo su Constitución Política.
La diferencia de opiniones se da entre los miembros del Consejo Superior, máximo órgano de dirección y gobierno de la institución, encargado de tomar cartas sobre el asunto. El representante estudiantil, Juan Camilo Muñoz, y el de profesores, Juan Carlos Yepes, se oponen a las decisiones tomadas por unanimidad por los otros siete miembros (ver recuadro Lo conforman).
Dos puntos los separan. El primero, la aprobación en bloque el pasado 7 de junio de 65 artículos de los 77 que conforman la propuesta para renovar el Estatuto, elaborada el año pasado por una comisión integrada por docentes, alumnos y directivos de la Universidad.
Según un comunicado enviado por el Consejo Superior, estos artículos se aprobaron rápidamente, pues eran de conocimiento de los miembros del órgano y se dejaron pendientes de debatir los concernientes al mecanismo de elección de rector y decanos al considerarlos parte de la estructura orgánica de la Universidad.
La segunda diferencia es, precisamente, la falta de acuerdo en cuál debe ser este mecanismo: mientras Yepes y Muñoz son partidarios de una elección por medio de voto directo y democrático, otros miembros consideran que la votación solo debe ser una parte de todo el proceso.
Los primeros sostienen que la comunidad educativa debe elegir sin intermediarios al rector, mientras que otros miembros dicen que el Consejo Superior debe tener la última palabra. En cuanto a los decanos es el rector quien decide después de que cada facultad envía una terna de aspirantes.
“Una comisión construyó la propuesta para dar el debate de la reforma. Se creyó que muchos de los elementos que fueron acordados en la construcción del articulado para reformar el Estatuto serían acogidos por el Consejo Superior, pero está sucediendo todo lo contrario”, indicó Yepes.
“Lo que ocurre se asemeja mucho a la frase de El Gatopardo, la novela de Giuseppe Tomasi di Lampedusa: 'Cambiar todo para que nada cambie'. Se promueve esta sensación de cambio por medio de este proceso, pero en el fondo se apuesta por el continuismo”, comentó Muñoz.
El rector de la U. de Caldas, Felipe César Londoño, es miembro del Consejo Superior. Tiene voz, pero no voto. “Todo está en discusión. Se han aprobado artículos, aunque provisionalmente. Según los planes, en agosto se definirá el Estatuto en una última sesión del Consejo Superior. Allí se revisará nuevamente todo el articulado y se podrán cambiar puntos anteriormente pactados”, indicó.
Visiones
Lo conforman
- Raquel Díaz Ortiz, delegada de la ministra de Educación, Yaneth Giha
- Fabio Hernando Arias, representante de la presidencia de la República
- Miguel Trujillo Londoño, representante de la Gobernación de Caldas
- Eduardo López y Gildardo Armel Arenas, representantes del sector productivo
- Bernardo Rivera Sánchez, representante de los exrectores
.- Rubén Darío Nieto, representante de los egresados
- Claudia Patricia Jaramillo, representante del Consejo Académico
- Juan Carlos Yepes, representante de los profesores
- Juan Camilo Muñoz, representante de los estudiantes
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