Para cerrar la brecha

a entrega de 10 mil créditos-becas para los mejores estudiantes inscritos en el Sisbén, anunciada por el Ministerio de Educación Nacional, es un gran aporte al cierre de la brecha que hay entre los sectores de la sociedad con más recursos económicos y los que menos tienen. El espíritu de la medida está bien orientado a que sea la educación el motor de desarrollo para los sectores rezagados de nuestra sociedad, con lo que el avance del país puede darse de manera más armónica.

Muchos de los jóvenes que resultarán beneficiados provienen de zonas rurales o de barrios marginados de municipios lejanos a las capitales. Así ocurrirá en Caldas con 201 estudiantes que obtuvieron buenos resultados en las pruebas Saber 11 y que no tienen recursos para acceder a estudios universitarios. Con este camino que se les abre, estos alumnos ejemplares harán sus carreras en las universidades públicas de las regiones, acreditadas como de alta calidad, en nuestro caso la Universidad de Caldas y la Universidad Tecnológica de Pereira. Para ayudarles a cumplir esos sueños también recibirían un incentivo adicional para sostenimiento.

Hoy se sabe que estudiantes de unos 82 colegios en Caldas recibirán este importante beneficio, lo que les abre oportunidades para convertirse en futuros profesionales y regresar luego a sus lugares de origen a ayudar a que salgan de las condiciones precarias en las que han estado. Porque este programa tiene que servir para que los propios dolientes de las regiones más apartadas contribuyan más adelante a que todo Colombia se desarrolle y que las huellas del centralismo empiecen a quedar atrás.

El hecho de que estos créditos-becas sean 100% condonables, con la única condición de que los estudiantes se gradúen, es una gran opción para que estos muchachos sigan siendo ejemplo para cientos de jóvenes en sus municipios. Además, para sus propias familias se convierten en una especie de punta de lanza de las posibilidades de salir de la pobreza, y ayudan a otros hogares a que comprendan que el camino de la educación es el que los puede llevar a mejorar sus condiciones de vida.

Sin ser medidas estructurales, y sin obedecer necesariamente a una gran política de educación para todo el país, la estrategia de los créditos-becas es buena, pero se requiere un mayor orden para que se mantenga la confianza en el programa y pueda salir adelante. Hay algunos reclamos de quienes sienten que, teniendo derecho a estas ayudas, no fueron tenidos en cuenta. Todo indica que el Ministerio de Educación cometió algunos errores en la entrega de su información acerca de quienes serían sus beneficiarios, debido a lo cual se han elevado reclamos desde varios municipios. Hay que ordenar ese asunto.

Hoy está claro que municipios como Belalcázar, Marmato, Marulanda, Victoria y Viterbo no alcanzaron estos beneficios. Es importante que las autoridades locales y regionales trabajen para que los estudiantes de esas localidades que se graduarán en el 2015 alcancen mejores desempeños en las pruebas Saber 11, y así poder obtener estas ayudas que no son para nada despreciables.

También es un incentivo para impulsar con más entusiasmo la acreditación en alta calidad de todas universidades regionales, pues de esa forma podrán ser una opción para los jóvenes favorecidos con las becas, y cursar sus estudios cerca de sus hogares.