Se aprobó esta semana en el Concejo Municipal de Manizales el procedimiento de expropiación por vía administrativa, que permite abrir un camino de negociación rápida con los dueños de los predios en el Macroproyecto San José, el cual se encuentra paralizado justamente por escasez de terrenos para avanzar en las obras. La mayor parte de los predios están en líos jurídicos, algunos de los cuales llevan más de seis años, por fallas en los procedimientos emprendidos desde la Administración Municipal, y desde luego también por falta de planeación.
Voceros de la comunidad estuvieron presentes en el recinto del Concejo manifestando su rechazo a dicha determinación. Es comprensible la actitud de los pobladores de la zona, quienes desde el comienzo del proyecto solo han recibido promesas incumplidas y hasta un desplazamiento forzoso hacia otras zonas de la ciudad. No obstante, compartimos que si se quiere acelerar el proceso y destrabar el macroproyecto, resulta fundamental tomar medidas como la de allanar el uso de la expropiación administrativa.
La realidad actual del macroproyecto es negativa, con la construcción de apenas 24 apartamentos en todo este tiempo, pese a que se tenían previstos cerca de 800; y también hay problemas con la asignación de las viviendas que se deben entregar este año. Tampoco han sido muy satisfactorios los trabajos ejecutados en la Avenida Marcelino Palacio, precisamente por la lentitud en la compra de predios, por todos los problemas legales que han surgido de usar el procedimiento judicial en las expropiaciones, con lo que se saturan los juzgados y se arman nudos sin salidas.
La comunidad debe tener claro que al aprobar la expropiación administrativa se pueden agilizar las soluciones habitacionales que viene esperando, al mismo tiempo que pueden continuar los procesos legales de reclamación si consideran que el precio pagado por la administración municipal es muy bajo. Se le da rapidez al macroproyecto para recuperar la confianza, y al mismo tiempo se brindan opciones realistas para los dueños de los predios.
Desde la Empresa de Renovación Urbana de Manizales (Erum) parece haber la real intención de destrabar las obras, lo cual nos parece acertado. En ese sentido, además de contar con herramientas como la expropiación por vía administrativa, es conveniente avanzar en la generación de terrenos para todos los demás proyectos contemplados para esta zona de la ciudad, como las vías, el centro integrado de desarrollo comunitario, un gran parque y las mejoras en el sector de la Galería, entre otros.
Es conveniente que se piense en crear una vocación institucional en esta zona de la ciudad, precisamente para asegurar que ese desarrollo sea positivo desde el punto de vista económico y social. Una opción podría ser trasladar allí el Cuerpo Oficial de Bomberos, que actualmente está en el sector de Fundadores, lugar que podría tener un uso más acorde con la dinámica comercial que se da en esa zona de la ciudad. En la medida en que haya cada día más actividad en la zona del macroproyecto también comenzarán a cambiar las condiciones de seguridad y el optimismo frente al futuro de esa iniciativa.
El objetivo es que al finalizar este año empiece a verse que el macroproyecto volvió a moverse. Ahora que se habla del posconflicto y que se anuncian recursos para ese tipo de tareas es fundamental que se gestionen recursos nacionales e internacionales, que puedan ayudar a impulsar todo lo previsto en este lugar de la ciudad, con la mira puesta en los problemas sociales que es urgente solucionar.
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