JOHNNY GUTIÉRREZ
LA PATRIA | MANIZALES
Albeiro Salinas es víctima del conflicto armado colombiano. Hace 20 años fue desplazado de Pueblo Rico (Risaralda). Arribó a Pereira a buscar empleo y a aprender nuevos oficios para trabajar, luego llegó a Chinchiná, donde reside actualmente.
"Lo más difícil es llegar a un lugar que uno no conoce. En la finca uno está acostumbrado a los oficios del campo como coger café o cuidar la tierra, y en la ciudad el trabajo es diferente", aseguró.
Hace dos años creó Kalimán, una ebanistería que le permitió salir adelante.
Ayer fue a la rueda de empleo que se hizo en la Agencia Pública de Empleo del SENA, para brindar trabajo a víctimas del conflicto. "Quiero contratarlos porque sé lo difícil que es buscar trabajo", explicó.
Luis Alfredo Marín, quien salió de Samaná por el conflicto y llegó a Villamaría en 1998 fue de los beneficiados por esta empresa, por lo que está satisfecho, aunque reconoce que poco conoce de la labor, debido a que siempre ha estado en labores del campo. "Necesitaría una capacitación para conocer cómo se manejan las máquinas para cortar madera", comentó.
Apoyo
Claudia Constanza López, promotora regional de empleo de Caldas, explicó que estas personas al arribar a una ciudad tienen problemas de adaptación. "Vienen de regiones apartadas con inconvenientes porque no están en la región que habitaban, por esta razón el Estado debe garantizarles la estabilidad y mejorar la calidad de vida", aseguró.
Desplazados por el conflicto armado como Marta Rubiela Osorio está de acuerdo con esto, pero también cree que hay víctimas que se acostumbran a los subsidios y se olvidan de trabajar.
"Es difícil ser desplazado. El Gobierno nos debe brindar ayudas y garantías, sobre todo capacitaciones, pero nosotros también debemos trabajar y buscar las oportunidades", insistió.
Carolina Suárez, profesional de la Unidad de Víctimas de Caldas, aseguró que se realizan capacitaciones para las víctimas y programas de sensibilización con empresarios para reducir la estigmatización que algunos tienen.
"Los empresarios en Caldas han recibido de forma positiva a la población víctima del conflicto, algunos tienen temores porque creen que no están capacitados, pero la mayoría se ha certificado en diferentes oficios gracias al trabajo con entidades como el SENA", expresó.
Recordó que las empresas vinculen víctimas a su planta de empleados tendrán beneficios tributarios. Una forma que implementó el Gobierno para impulsar la contratación de esta población.
Suárez también afirmó que brindar oportunidades laborales a las víctimas es un trabajo en conjunto, y que una oportunidad laboral para ellos es una forma de mejorarle la calidad de vida.
15 empresas que de Caldas se vincularon a la oferta. La jornada se hizo en simultáneo en Colombia.
Perfiles ofrecidos
Auxiliar de cocina, asesor comercial, conductor de microbús, agentes call center, mayordomo, ayudante de construcción; operario de collarín, operaria de máquina plana, pintor de muebles, operario en ebanistería, tapicero, auxiliar contable, tecnólogo en mercadeo, y regente de farmacia.
Si es víctima del conflicto y no pudo asistir ayer a la jornada de empleo también puede buscar asesoría a través de la página web www.agenciapublicadeempleo.sena.edu.co
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