La Industria Licorera de Caldas espera gerente y nuevos acuerdos en marzo

Marzo se convertirá en un mes crucial para la Industria Licorera de Caldas (ILC).

Así lo esperan los funcionarios de la destilería, el sindicato Sintrabecólicas, el actual gerente encargado, Carlos Neira Estrada, y hasta el gobernador de Caldas, Guido Echeverri Piedrahíta, quien prometió decisiones para comienzos del próximo mes.

Las expectativas no solo se centran en la elección de un gerente en propiedad, luego de dos meses de interinidad, y del estudio que hace una llamada caza talentos (head hunter), sino en varios acuerdos comerciales que buscan enderezar el camino de la ILC y superar las regulares cifras del 2011.

En lo que respecta al gerente, los propios congresistas de Caldas comenzaron a pedir resultados, a la espera de que sea un proceso técnico, y no político, como temen algunos.

La representante a la Cámara Adriana Franco, liberal, aseguró que es hora de tomar decisiones absolutas sobre quién se empoderará de la gerencia y cuál será su equipo de trabajo.

Aseguró que no hay presiones políticas y que espera que sea un proceso técnico, en busca del gerente que garantice el mejor futuro para la destilería y para las rentas de la región.

Algo similar planteó Hernán Penagos, parlamentario de la U, quien sostuvo que "las interinidades no le sirven a ninguna entidad, y aunque hay un gerente encargado que sabe del tema, es necesario que se sepa quién regirá los destinos a largo plazo, para definir un plan de acción".

Las promesas de que la elección es técnica y no política no tranquilizan a algunos empleados, y por esta razón el presidente de Sintrabecólicas, Víctor Bustacara, pidió una reunión con el mandatario departamental, para analizar el tema y definir varios proyectos que están en veremos.

Apertura parcial de fronteras

En lo que tiene que ver con los acuerdos comerciales, también hay retos para el próximo mes.

Uno de ellos tiene que ver con los acercamientos con la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA) con el fin de iniciar una especie de apertura gradual de fronteras.

La idea es formalizar la introducción legal en Antioquia del Ron Viejo de Caldas y a su vez para que a Caldas llegue el aguardiente Antioqueño.

Según Neira Estrada, el objetivo es mitigar el contrabando técnico entre las dos fronteras, y que los recursos de salud y educación de ambos departamentos lleguen a sus arcas, pues en el caso de Antioquia hay unas 2 millones a 3 millones de botellas que les entran de Ron Viejo de Caldas.

Se adelanta un modelo económico que se analizará en marzo para determinar cuánto estarían perdiendo las dos regiones y cuánto podría representar el nuevo convenio en ganancias e impuestos.

Pese a que vuelve y juega la interinidad del gerente, Neira Estrada dice que es optimista. "Lo veo cercano, porque en palabras de la Secretaría de Hacienda de Antioquia, al gobernador Sergio Fajardo le interesa analizar esas cifras y determinar cuánto se están perdiendo, a sabiendas de que el Ron Viejo de Caldas se consigue en las calles de Medellín y en los pueblos de Antioquia, por lo que es una forma de parar esa evasión y que los recursos le lleguen a las arcas de ese departamento".

Su propuesta es abrir las fronteras, ponerle un techo a cada uno de los productos, o ensayar durante un tiempo determinado.

Destilería prendida todo el año

Otro plan apunta a fortalecer nuevamente la producción de alcoholes.

De acuerdo con Neira Estrada, la idea es tener prendida la destilería todo el año, y llegar a un acuerdo para que las licoreras que están importando alcoholes de Ecuador, Bolivia y Panamá, entre otros países, incluyendo la FLA, cuenten con la Licorera de Caldas. Esto les permitiría reducir sus costos y tener un producto de mayor calidad.

En el caso de la destilería antioqueña, su necesidad apunta a unos 13 millones de litros de alcohol este año, por lo que la ILC podría venderle unos 8 millones, como ofertas parciales o realizar una unión temporal para ofrecerle el total de sus requerimientos.

Esto, dijo, no solo mejoraría las ventas de la Licorera, sino que apalancaría sus costos fijos. La esperanza es que hacia finales del próximo mes se defina esta negociación y la FLA abra una licitación para determinar cuál sería su oferta de compras.

A estos acuerdos se suma la meta de concretar el próximo mes el acuerdo con la multinacional británica Diageo, para producirle el cóctel a base de vodka Smirnoff Ice.

El cronograma es que en marzo quede firmado el contrato y arrancar en julio la producción de la maquila de unas 10 millones de botellas de 275 mililitros por año.

Como si fuera poco, la ILC ahora espera, también hacia marzo, concretar el proyecto para hacer la maquila del aguardiente del Huila (Doble Anís), sumadas a las seis que hoy ya tiene, incluyendo los aguardientes de Caquetá, Chocó, Norte de Santander y las maquilas de aguardiente de Nariño, Llanero, Meta y Putumayo.

La concreción de todas estas metas muestran que marzo será clave para definir el futuro de la ILC.

En cifras

* 20 millones de botellas, la meta de ventas de ILC en 2012 de ron y aguardiente en el mercado interno y externo.

* 33 millones, la meta total de ventas, incluyendo varias maquilas.